El PSC acepta entrar en el gobierno municipal de Ripoll para echar a la ultra Sílvia Orriols

Junts, ERC y el PSC tienen muy avanzadas las negociaciones para alcanzar un acuerdo que permita presentar la moción de censura contra Sílvia Orriols, alcaldesa de Ripoll. Las tres formaciones, que juntas suman ocho concejales sobre 17, están ultimando los contactos para formar gobierno. Los socialistas han aceptado formar parte de ese gabinete para facilitar la moción de censura, según ha avanzado SER Catalunya y han confirmado a este diario fuentes socialistas. El plazo para presentarla expira el día 24 de febrero.

Los socialistas obtuvieron dos regidores en los comicios municipales y su objetivo en principio era respaldar la operación, pero no entrar en el gobierno. Su cambio de criterio obedece a las presiones ejercidas por Junts y ERC. “El PSC ha hecho todo lo posible para que haya un gobierno alternativo en Ripoll. Ha estado a su disposición en todo momento. Y ha aceptado entrar en el Govern porque Junts y ERC se lo han pedido”, han señalado las mismas fuentes socialistas. El pacto se circunscribe solo a Ripoll, han añadido las mismas fuentes. .

Con seis concejales, Aliança Catalana venció las elecciones en 2023. Junts y ERC, con tres cada uno, y PSC, con dos, empezaron los contactos hace un mes para desplazar a Orriols de la alcaldía. La CUP cuenta con otro edil. Las negociaciones siguen abiertas y este martes está prevista una nueva reunión entre los grupos de la oposición para perfilar el pacto. “Tenemos que poder hacer un buen acuerdo para gobernar, de lo contrario no serviría de nada”, explican fuentes de Junts, uno de los partidos que integrará la mayoría alternativa a Orriols.

Todas las partes temen que la moción de censura comporte un desgaste que después pase factura en las elecciones. El ejemplo más reciente en ese sentido fue el del popular Xavier García Albiol en Badalona: fue desalojado por una moción de censura impulsada por todas las fuerzas de izquierda y después arrasó en las elecciones con más del 50% de los votos. “Haremos lo que haga falta para que una alternativa más mayoritaria sea posible”, han afirmado fuentes socialistas.