Se busca profesor de Catalán, Matemáticas o Tecnología: las plazas con más vacantes tras las oposiciones

El proceso de estabilización de los interinos ha servido para muchos de estos profesores con exceso de temporalidad logren una plaza fija, pero también ha puesto cifra a los agujeros del sistema en cuanto a la falta de profesorado en algunas especialidades. De las 27.097 plazas convocadas en Cataluña entre el concurso de méritos y unas oposiciones ligeras, 779 han quedado sin cubrir. La mayoría de estas -671- son de secundaria, es decir de ESO y FP. Y se confirman los sospechosos habituales: Lengua Catalana, Matemáticas y Tecnología son las disciplinas en que cuesta más encontrar profesor.

El pasado lunes, el Departamento de Educación explicaba a los medios de comunicación el resultado de este proceso de estabilización, que consistía en dos fases: un concurso de méritos con el que se han hecho fijos 12.858 profesores, valorando los años de experiencia y la formación, y unas oposiciones light (podían elegir entre más temas para hacer la exposición y no debían presentar una programación) en las que 13.459 docentes más han pasado a ser funcionarios. Pero además de estas cifras, 4.129 de los que aprobaron no han obtenido plaza y 9.750 no superaron los exámenes.

Pero no todas las plazas que habían salido a concurso han encontrado quien las ocupe: 779 han quedado vacías, sea porque no se han presentado suficientes aspirantes o porque han aprobado menos de los necesitados. El Departamento facilitó el martes a los sindicatos el detalle de las especialidades con más dificultades para encontrar profesorado. La lista la encabezan Lengua y Literatura Catalana, Matemáticas y Tecnología, unas materias sobre las que hace tiempo alertan centros y sindicatos.

En el caso de Lengua Catalana han quedado 105 vacantes. A esta especialidad se presentaron 822 aspirantes, pero solo aprobaron 552 (67%), un número insuficiente para cubrir las 657 plazas. En Matemáticas, la situación es idéntica: 1.018 aspirantes, pero 683 aprobados (67%) y 779 plazas. En Tecnología había 675 candidatos, y aunque aprobaron el 80% (545 docentes), no ha sido suficiente para cubrir las 636 vacantes.

Este patrón se ha repetido en muchas especialidades de secundaria, pero también se ha dado el caso en que se han presentado menos aspirantes que plazas. Es el caso de Organización y gestión comercial (87 plazas, pero solo 65 aspirantes y 54 aprobados), Instalaciones electrotécnicas (68 plazas, 55 candidatos y 48 aprobados), Sistemas y aplicaciones informáticas (95 plazas, 60 aspirantes y 48 aprobados) y Francés (169 plazas, 155 evaluados y 136 aprobados).

“Habría que hacer una diagnosis de lo que está pasando. Porque no hay profesores en la bolsa y los que se presentan no aprueban. Y en algunas no hay suficientes aspirantes, y ellos es significativo porque revela que hay gente que no quiere dedicarse a la docencia”, valora Marga Romartínez, de CC OO.

Educación aseguró el lunes que estas 779 plazas sin cubrir se volverán a convocar en las oposiciones ordinarias de 2024. Pero los sindicatos están en contra. “No estamos de acuerdo con pasarlas a las oposiciones ordinarias porque estas serán más difíciles y no será una convocatoria para estabilizar interinos”, tercia la portavoz de Ustec, Iolanda Segura. Los sindicatos son más partidarios para que se vuelvan a convocar un concurso de méritos o unas oposiciones extraordinarias diseñadas para estos interinos.

Otro punto pendiente de negociación con los sindicatos es qué pasa con los interinos que han suspendido ambas convocatorias. Departamento y representante de trabajadores coinciden en que hay que dar continuidad a estos trabajadores porque el sistema no se puede permitir prescindir de ellos. Pero Educación ha emplazado el debate hasta noviembre, cuando deben resolverse todos los recursos, así que la adjudicación de plazas será definitiva y entonces se conocerá cuántos han quedado fuera y cuántos tienen un exceso de temporalidad. “Hay gente con 55 años, a los que solo le quedan 10 años para jubilarse y llevan muchos años en la enseñanza, hay que dar solución a estas personas”, reclama Romartínez.

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