La Generalitat veta la delegación de voto en las cámaras de comercio

El Govern ha dado este martes un paso decisivo en la regulación de las próximas elecciones a las cámaras de comercio catalanas, que se celebrarán el próximo setiembre. Ha aprobado un decreto que, junto a una resolución a la que dará el visto bueno a mediados de este mes, reafirma la decisión de la Administración autonómica de que no se pueda delegar el voto en la elección de los miembros de las corporaciones, uno de los puntos que acabaron llevando las elecciones de la Cámara de Barcelona de 2019 ante los tribunales y por el que el Tribunal Superior de Justicia de Cataluña (TSJC) decidió anular sus resultados.

Los próximos comicios volverán a incluir el voto electrónico, tal y como sucedió en 2019, y ahora el Govern quiere garantizar que en el momento del voto no haya relación entre el sentido del voto y la persona que lo ha realizado. Es decir, que no haya intermediarios. Para ello, se asegurará que el votante utilice directamente su certificado digital, tal y como marca la ley, y se fijará otros sistemas de control que todavía no están decididos. La plataforma de voto tendrá que ser fiscalizada por la Agencia de Ciberseguridad de Cataluña.

El voto presencial también estará permitido, pero no se permitirá, como sucedió hace cuatro años, que un votante que lo haya hecho de forma telemática pueda después acudir a las urnas físicas con el objetivo de modificar el sentido de su decisión, tal y como sí se permitió en 2019.

El calendario electoral definitivo se conocerá a mediados de este mes, cuando la Genereralitat publique la resolución de convocatoria. La gran incógnita de esta cita es qué sucederá en Barcelona, donde la plataforma independentista Eines de País, auspiciada por la Asamblea Nacional Catalana, se hizo con las riendas de la corporación de derecho público batiendo al respeto de candidaturas. Este año la entidad prevé volverse a presentar, previsiblemente a otra lista que encabezará Josep Santacreu, exconsejero delegado de DKV, según avanzó La Vanguardia.

Fuentes del Departamento de Empresa señalan que la nueva normativa sobre cámaras de comercio pretende aunar la legislación existente, “reforzar la seguridad jurídica” y “facilitar la mecánica del proceso” electoral.

Entre las novedades que figuran en la normativa aprobada por el Govern se encuentra la reducción de los epígrafes, las categorías de actividad económica a través de las cuales se organizan los plenos camerales. Asimimismo, en el caso de los vocales que se decidirán por sufragio hay cambios en Barcelona y Terrassa, a causa de una reducción de los denominados asientos de plata, aquellos que ocupan las empresas que mayor aportación económica están dispuestas a efectuar. En el caso de Barcelona, al reducirse las vocalías de mayor aportación de 14 a dos asientos, los asientos por sufragio pasan de 40 a 52. Y se reservan otros seis para las organizaciones empresariales, Foment del Treball y Pimec.

Una vez escogidos los titulares de los epígrafes se constituirán los nuevos plenos camerales, previsiblemente en noviembre. Después se procederá a la elección de cada presidente.

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