El parlamento catalán pide a la Fiscalía que actúe contra Pedro Sánchez por eludir la comisión de investigación sobre Pegasus

La Mesa del Parlamento catalán ha acordado este martes, con los votos favorables de Esquerra, Junts y la CUP, dar traslado a la Fiscalía de la incomparecencia del presidente Pedro Sánchez en la comisión de investigación que tiene la cámara catalana para aclarar el ‘caso Pegasus’ de espionaje a políticos catalanes y personas vinculadas a movimientos independentistas. La mesa, con el voto contrario del PSC, considera que el presidente Sánchez bloquea el esclarecimiento de los hechos y reclama al Ministerio Fiscal que valore qué medidas procede imponer. El reproche de la mesa del Parlament incluye a otros representantes de la Administración central y del Poder Judicial que también obviaron la citación para dar explicaciones ante la comisión. Se trata de las vicepresidentas primera y segunda del Gobierno, Nadia Calviño y Yolanda Díaz; los ministros de Defensa y de Interior, Margarita Robles y Fernando Grande-Marlaska; la exvicepresidenta primera Carmen Calvo; la exdelegada del Gobierno en Cataluña, Teresa Cunillera; el fiscal general del Estado, Álvaro García, y el juez del Tribunal Supremo Pablo Lucas Murillo.

A finales de septiembre, el parlamento catalán decidió constituir una comisión para investigar quien ordenó el presunto espionaje practicado con los programas informáticos Pegasus y Candiru sobre medio centenar de personas del entorno independentista. El objetivo era “darle a la ciudadanía información y transparencia”. Sin embargo, la comisión nació rodeada de dudas acerca de su eficacia real, porque carece de competencias para forzar a nadie a declarar como testigo.

Pedro Sánchez desatendió el requerimiento para que acudiera a dar explicaciones el 3 de marzo, y tampoco se presentó a una segunda convocatoria, el pasado día 14. Igual respuesta dieron a las llamadas otras ocho autoridades que, supuestamente, pueden tener información acerca de las escuchas telefónicas.

El Parlament pone de relieve que en los requerimientos de comparecencia, las personas convocadas, en calidad de testigos, fueron advertidas de sus derechos y obligaciones y de las responsabilidades penales en que podían incurrir, tal como recoge el Reglamento de la institución.

El Gobierno descartó la comparecencia del presidente, pese a mostrar “el máximo respeto institucional” al Parlament. Desde el equipo de Sánchez se alega que el presidente y sus ministros rinden cuentas ante el Congreso y el Senado, unos espacios donde los miembros del Ejecutivo ya han respondido a múltiples preguntas y comparecencias sobre esta cuestión, recuerdan estas fuentes. El Parlament tiene capacidad para solicitar comparecencias en las comisiones de investigación, pero carece de fuerza sancionatoria para reaccionar cuando se desatiende una citación. Con anterioridad ya quedó en nada la solicitud de comparecencias de jefes de Gobierno. Lo hizo en 2017, citando a Mariano Rajoy y Soraya Sáenz de Santamaría en motivo de la Operación Cataluña, también relacionada con el espionaje al independentismo. Y volvió a hacerlo un año más tarde —también citando a líderes del Gobierno del PP— para dar explicaciones sobre la aplicación del artículo 155 de la Constitución, que implicó la suspensión del autogobierno de Cataluña.

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