El perfil del ladrón en Barcelona: hombre, joven, multirreincidente y oportunista
Los hurtos disminuyen un 26% en la ciudad frente al descenso del 13% de los robos violentos
Los Mossos d’Esquadra llevan años radiografiando a los ladrones que actúan en Barcelona y que generan una elevada sensación de inseguridad. El análisis de los datos de 2022 dibuja un perfil claro: son hombres, jóvenes, de entre 18 y 25 años, con un abultado currículum de detenciones y que actúan por oportunismo, solos, por la tarde-noche, en el centro de la ciudad, contra una única víctima y cometen o hurtos o robos violentos. La policía catalana ha elaborado un listado con 283 multirreincidentes basándose en los datos del año pasado, según han explicado en rueda de prensa. Todos ellos suman 2.270 detenciones (ocho de media por persona) y 5.600 hechos delictivos (una veintena cada uno). Solo nueve son mujeres.
En el podio del grupo de los 300 multirreincidentes, el más activo acumula 25 detenciones, el segundo, 24, otros dos han sido detenidos 23 veces, y un quinto, 22. Solo dos de ellos permanecen en la actualidad en prisión preventiva. Del total de los detenidos por robos violentos por la policía catalana, un 10% ingresa en la cárcel. Las cifras también indican que el año pasado descendieron un 26% los hurtos en la ciudad (260 al día) y un 13% los robos violentos en la calle (30) respecto a 2019. Estos últimos son los que más sensación de inseguridad generan, a pesar de que en el 97% no se usaron armas, y el 74% se saldaron sin heridos.
La policía catalana ha detectado dos tipos de ladrones. El más habitual es el delincuente “oportunista”, en palabras de la comisaria jefa de Barcelona, Marta Fernández. Personas que viven en Barcelona y que antes de actuar valoran el “riesgo y beneficio” que tiene la acción que van a cometer. También tienen en cuenta la facilidad para revenderlo luego. Algunos de ellos cometen además robos con fuerza en establecimientos, y suelen vivir en locales o pisos ocupados (la policía ha detectado 35). El segundo tipo, menos común, es la delincuencia organizada: personas que viajan expresamente a la ciudad catalana a cometer delitos, sobre todo aprovechando ferias, fiestas y otros acontecimientos. En el listado de los multirreincidentes, 26 tienen antecedentes en otros países por delitos similares.
Los investigadores han detectado además una mezcla entre ambas modalidades de ladrones, que se da sobre todo en los robos de relojes de lujo, según ha explicado el jefe de investigación de Barcelona, el inspector Josep Naharro. En 2019, este tipo de robos los llevaba a cabo en esencia el crimen organizado. En 2022, la policía catalana ha comprobado que esas organizaciones más estructuradas han “cedido parte del riesgo” al ladrón local, que es quien comete el robo violento, mientras que el transporte y la venta sigue quedando en manos del ladrón más especializado. En este tipo de casos, insisten los Mossos, lo más sustancial es atacar al receptador para atajar unos robos que suponen el 7% del total.
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