Meliá reabrirá el hotel Juan Carlos I de Barcelona con el nombre de Miranda de Pedralbes

Meliá Hotels Internacional (MHI) gestionará el emblemático hotel Juan Carlos I de Barcelona, que presentó concurso de acreedores en el mes de septiembre pasado con una deuda de 160 millones de euros, y pasará a llamarse Miranda de Pedralbes. Meliá Hotels, la actual propietaria del complejo y el principal inversor del hotel, Tyrus Capital, ha anunciado un acuerdo a largo plazo por el que MHI asuma la gestión del establecimiento, que se añadirá a su marca de lujo Gran Meliá, y del Palau de Congressos de Catalunya.

Según ha informado Meliá en un comunicado, el hotel, que se construyó en la época de la Barcelona olímpica, potenciará la comunicación con los jardines de la antigua Torre Melina, que se integrarán en el establecimiento, con el objetivo de crear un “exclusivo resort urbano”. Además, se prevé la apertura de un restaurante gastronómico de autor.

El consejero delegado de Meliá, Gabriel Escarrer, ha asegurado que este proyecto pretende crear un auténtico “hotel-destino” para público de ocio y también para el viajero de negocios o de congresos. Para el consejero delegado de Tyrus Capital, Tony Chedraoui, este acuerdo es un “paso más” en la “estrecha relación” que mantienen con Meliá. El hotel Miranda de Pedralbes y el Palau de Congressos de Catalunya reabrirán en los próximos meses, una vez acabados los trabajos de renovación y de mejora de las habitaciones y zonas comunes, así como la incorporación de nuevas zonas de ocio y gastronomía. Los trabajadores del hotel, que está cerrado desde el verano de 2020 cuando abrió unos meses tras permanecer cerrado sin actividad durante la pandemia, continúan en ERTE.

El ya ex Juan Carlos I es uno de los mayores de la ciudad, con 432 habitaciones y un número importante de suites. El hotel gestiona conjuntamente el vecino Palau de Congressos —con capacidad para 3.000 personas— además de la amplia zona de jardines, que incluyen piscinas.

El pasado mes de setiembre, y tras un periplo sin actividad, Barcelona Project’s, la sociedad gestora del hotel presentó concurso de acreedores, según explicó La Vanguardia, con unas deudas de 150 millones de euros. El objetivo de la sociedad, controlada ya por Tyrus Capital, perseguía un acuerdo con los acreedores para rebajar esa pesada carga.

Como para otros muchos hoteles, la crisis del coronavirus se convirtió en una pesada losa para el Juan Carlos I, que ya llegaba a esa caída de la clientela con la tesorería exhausta.

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