La Torre Negra que, 30 años después, no sucumbe ante Nuñez y Navarro

Los alrededores de la Torre Negra, una imponente masía románica fortificada del año 1145, no serán, de momento, pasto del cemento. Casi tres décadas de pleitos después (la disputa empezó en 1993), el Tribunal Superior de Justicia de Cataluña (TSJC) ha denegado el recurso presentado por la empresa Josel SL (grupo Núñez y Navarro) por la modificación del plan urbanístico que el Ayuntamiento de Sant Cugat del Vallès (Barcelona) aprobó para evitar la construcción de 2.800 viviendas en 162 hectáreas en torno al parque natural de Collserola. En su sentencia, la justicia avala la conversión de los espacios a suelo no urbanizable y confirma la victoria del sector ecologista, vecinal y del Consistorio, en guerra judicial tras la compra de los terrenos por parte de la promotora en 1993. El fallo aún no es firme y cabe recurso antre el Tribunal Supremo.

La lucha vecinal en defensa de los terrenos que envuelven la Torre Negra encontró consensos tanto en la calle como en el seno del Ayuntamiento en una época (a principios de los 90,) en la que la lucha ecologista estaba todavía en ciernes. La mayoría de grupos parlamentarios consensuaron defender desde un principio la protección ambiental de los terrenos ante las aspiraciones urbanísticas de Núñez y Navarro, el gigante patrimonial más reconocido de Cataluña y cuyo fundador, José Luis Núñez (1931-2018), ostentaba por entonces la presidencia del FC Barcelona.

El litigio se ha alargado tanto en el tiempo que ha sobrevivido hasta cuatro alcaldes (Joan Aymerich, Lluís Recoder, Mercè Conesa, Carmela Fortuny), y a su partido: Convergència i Unió, la formación que desde 1987 ostentó la alcaldía hasta que ERC aunara apoyos en las últimas elecciones (2019) para obtener la vara de mando. Y no está asegurado que la guerra judicial no sobreviva a otro gobierno municipal: la sentencia del Tribunal Superior no es firme, y la promotora puede presentar otro recurso ante el Tribunal Supremo.

La actual alcaldesa, Mireia Ingla (ERC), ha celebrado este viernes la victoria judicial en esta última batalla en los tribunales. “Con esta sentencia damos un paso de gigante para preservar un espacio que da entrada al Parque Natural de Collserola desde Sant Cugat y con unos grandes valores sociales y paisajísticos para el conjunto de la ciudadanía”, ha dicho la republicana. La Plataforma Cívica para la Defensa de Torre Negra i Rodalies se constituyó en 1994. Un año después, ya tenía 10.000 firmas pidiendo su protección.

La batalla en torno a la torre fortificada ha pasado con el paso de los siglos de las espadas a las togas y las demandas. Durante todo este tiempo ha habido sentencias para todos los gustos, a favor de ambas partes. En total, el Consistorio ha tenido que realizar hasta tres modificaciones del plan urbanístico para convertir las hectáreas en no urbanizables. Antes, el TSJC había anulado las dos primeras modificaciones por considerar que este paraje no podía ser preservado por sus valores naturales. El Consistorio tiró entonces de ingeniería jurídica y pasó a clasificarlos como suelos no urbanizables ordinarios, la fórmula que finalmente ha reconocido el alto tribunal catalán para mantener alejadas las grúas de sus parajes. La toma de la torre por parte de la promotora, de momento, ha fracasado.

Puedes seguir a EL PAÍS Catalunya en Facebook y Twitter, o apuntarte aquí para recibir nuestra newsletter semanal