Damià Calvet será el nuevo presidente del Puerto de Barcelona en sustitución de Mercè Conesa

El exconseller de Territorio y Sostenibilidad de la Generalitat Damià Calvet será el nuevo presidente del Puerto de Barcelona en sustitución de la actual presidenta, Mercè Conesa, que ha ostentado este cargo durante prácticamente tres años. El traspaso se hará efectivo la primera semana de julio, tal como ha anunciado este jueves en rueda de prensa el vicepresidente del Govern, Jordi Puigneró, junto con el presidente de Puertos del Estado, Francisco Toledo; la todavía presidenta del enclave, Mercè Conesa, y el exconseller Calvet.

Puigneró ha defendido que durante su mandato Conesa ha contribuido a construir un Puerto “más sostenible, verde y competitivo”, y a posicionarlo como referente a nivel europeo y global. Ha destacado que una de las prioridades de Conesa ha sido la descarbonización para adaptar las infraestructuras y hacerlas más verdes, y que el Puerto se está digitalizando, “está conectado”, aunque cree hay que tener cuidado con los ciberataques.

Por su parte, Calvet ha puesto en valor el papel de Conesa como presidenta del puerto, que ha sido la primera mujer en presidirlo y que además fue nombrada por él mismo: “Continuaré el trabajo empezado por ella”, ha afirmado, y también el de anteriores presidentes, de los cuales ha citado a Joaquim Tosas, Joaquim Coello, Jordi Valls y Sixte Cambra.

“Todo aquello que pueda ser el Puerto de Barcelona se extiende al país entero”, ha dicho, y se ha comprometido a trabajar para tener uno de los puertos más innovadores del mundo desde la sostenibilidad, y a que sea un agente activo, dinamizador de Barcelona y del área metropolitana de forma que no se pierda la perspectiva mediterránea.

Calvet considera que habrá muchos temas de competencias del Puerto que se tratarán en las mesas de negociación con el Gobierno, en las comisiones bilaterales, y ha asegurado que intentará que se gestionen mediante los criterios políticos que marque el Govern, y Puigneró también ha asegurado que Catalunya tiene que gestionar sus infraestructuras.

Sobre su experiencia, Conesa ha contado que han sido tres años “duros” de presidencia, en los que han tenido que afrontar un ciberataque, una pandemia, la negociación de un convenio colectivo cuya aplicación todavía deja dudas --ha dicho--, y una crisis económica y ambiental; por otro lado, ha puesto en valor la alianza con el Puerto de Busan.

Cree que han trabajado “desde una cohesión interna sin precedentes” y que la comunidad portuaria ha entendido que de la crisis había que salir conjuntamente, y que con los datos actuales se puede decir que el Puerto de Barcelona es resiliente, y que sobre todo lo es el tejido empresarial que lo envuelve.

Ha destacado algunos de los retos que tiene el Puerto por delante, como reducir la huella medioambiental y luchar por la igualdad de género, buscar alianzas para seguir presente en las rutas marítimas, encajar con la ciudad de Barcelona, y ha mostrado su confianza en Calvet para hacerlo: “No puedo dejar en mejores manos la autoridad portuaria”, ha concluido.

El primer crucero llegará el día 26 de junio e iniciará una recuperación escalonada -la previsión es que desde julio a diciembre se cierre el año con una cifra que no será tan buena como otros años, ha reconocido-, ha recordado Conesa, y ha dicho que el Hermitage ha sido orientado por el Puerto de una forma “correcta y positiva”.