Las restricciones en educación en Cataluña: clases telemáticas en bachillerato y FP y suspensión parcial de las extraescolares

El sector educativo es uno de los que se salva mayoritariamente de las duras restricciones aprobadas este jueves, pero no se escapa de las informaciones contradictorias y matizaciones de última hora. Si la portavoz del Govern Meritxell Budó anunciaba al mediodía que las clases teóricas se harían de forma telemática en bachillerato y FP y que la medida entraría en vigor, junto al resto, este viernes y durante 15 días, por la tarde el consejero de Educación, Josep Bargalló, matizaba el rigor de la medida asegurando que, a partir del lunes, los centros de esta etapa postobligatoria “trabajarán por reducir la presencialidad, hasta final de año”.

Las actividades educativas han estado todo el tiempo en el punto de mira, especialmente en los últimos días de recrudecimiento de la pandemia. Mientras algunas voces han abogado por el cierre de escuelas, otros expertos y la Generalitat han defendido siempre mantenerlas abiertas “hasta las últimas consecuencias”. Pero hace unos días, Educación empezó a abrir el melón de la posibilidad de implantar las clases telemáticas de forma generalizada en los institutos. Actualmente, el 7% de centros de bachillerato y el 20% de FP tienen implantado un sistema híbrido, que combina asistencia a clase con clases a distancia.

A la espera del redactado oficial que publique este viernes el Diario Oficial de la Generalitat, Budó avanzó que el Procicat, el órgano que gestiona la pandemia en Cataluña, había aprobado “reducir la presencialidad de todas las actividades que se puedan hacer telemáticamente” en bachillerato y FP, y que los alumnos solo asistirán al centro para realizar prácticas o exámenes. Pero horas más tarde, Bargalló salió al paso asegurando que no se podía pedir a los centros realizar el cambio de forma tan apresurada y que el viernes se mantendría “una absoluta normalidad”. Pero a partir del lunes, los institutos deberán empezar a reducir la presencialidad “de la forma más adecuada para mantener el derecho a la educación”, terció Bargalló, dejando en manos de los centros el grado de aplicación de la enseñanza telemática. Además, las clases a distancia se mantendrán hasta el final del trimestre. “No podemos pedir la modificación para solo 15 días”, justificó el consejero.

La enseñanza telemática también se aplicará en otro tipo de estudios como escuelas de idiomas o de adultos, mientras que las clases presenciales se mantienen en el resto de etapas o enseñanzas, desde la infantil a la secundaria. La diferencia entre escuelas e institutos no es baladí, ni para Educación ni para Salud. Mientras los alumnos de primaria (hasta los 12 años) son considerados poco transmisores del virus y se detecta menos incidencia de la enfermedad en esta franja, en la secundaria y postobligatoria se admite que la evolución del virus está comportando de una forma más similar que en el resto de la comunidad y en los adolescentes los efectos de la covid-19 también es más parecida a los de los adultos.

También influyen aspectos pedagógicos, ya que en los más pequeños es más difícil aplicar las clases telemáticas generalizadas. Y aspectos técnicos. Y es que para extender las clases online sería necesario primero poner remedio a la brecha digital para evitar que los alumnos más vulnerables queden rezagados, como ya pasó durante el confinamiento. Educación anunció en verano la intención de repartir 300.000 dispositivos entre alumnos, pero a partir de 3º de ESO. El Departamento aseguró hace unos días que todavía estaban poniendo a punto los primeros que han llegado, pero no concreta de cuántos dispone ni si se han enviado ya a los centros.

Universidades

En cuanto las universidades, el Procicat decidió extender 15 días las clases telemáticas, excepto para las prácticas, exámenes, seminarios y la investigación. Pero con toda probabilidad la medida se alargará, ya que las 12 universidades catalanas y la Generalitat, en el marco del Consejo Interuniversitario de Cataluña, acordaron el pasado miércoles por unanimidad, prorrogarla durante un 30 días. Las universidades fueron una de las primeras a vivir las restricciones y desde el 15 de octubre todas las clases teóricas se hacen a distancia. La medida, entonces, tenía validez dos semanas, periodo que finalizaba este viernes.

Extraescolares

En referencia a las extraescolares, se suspenden las actividades de ocio infantil y de deporte infantil que se realiza fuera de los centros, como por ejemplo en centros deportivos o academias de idiomas. No obstante, se establece una excepción: se mantienen las actividades que organizan las escuelas o las asociaciones de familias, que se realizan en el mismo centro escolar y siempre y cuando “mantengan los grupos estables”. Actualmente, en las extraescolares es habitual que se mezclen los alumnos diferentes grupos, así que las actividades se tendrán que rediseñar para que esto no se produzca, según apuntó el Departamento de Educación.

Como ya pasó en el confinamiento de primavera, la Generalitat abrirá una línea de ayudas para compensar las pérdidas del sector por la suspensión de las actividades. En esta ocasión se ha anunciado una bolsa de 20 millones de euros.

Mientras tanto, el agravamiento de la pandemia también está teniendo su reflejo en las aulas. Este miércoles se notificaron 831 nuevos positivos en los centros escolares, de los cuales 769 corresponden a alumnos, 74 a docentes y personal administrativo y 15 a monitores o trabajadores de la limpieza, según recoge la web Traçacovid, de seguimiento de la pandemia en los centros escolares. La cifra diaria de positivos no deja de aumentar, y es superior a los 660 de media diarios registrados la semana pasada o los 280 de la semana anterior. Actualmente hay 79.524 alumnos confinados (un 5,52% del total) y 3.635 docentes. Asimismo, casi una tercera parte de los centros escolares tiene algún grupo confinado concretamente hay 3.391 grupos en cuarentena de 1.482 centros educativos (el 29% el total).