El periodista Pablo González cumple dos años preso en Polonia sin que se presenten cargos contra él

El periodista español de origen ruso Pablo González Yagüe cumple dos años en prisión preventiva en Polonia sin que se hayan presentado cargos contra él. González fue arrestado durante la noche del 27 al 28 de febrero de 2022, días después del inicio de la invasión rusa de Ucrania, en la ciudad polaca de Przemysl, próxima a la frontera ucrania. El Gobierno polaco difundió tres días después una nota en la que detallaba que la Agencia de Seguridad Interior (ABW) había capturado a González “bajo sospecha” de realizar “operaciones en favor de Rusia, valiéndose de su condición de periodista”, durante la crisis de refugiados que siguió al estallido de la guerra, pero aún no se han presentado cargos formales contra él.

A preguntas del diputado de Bildu Jon Iñarritu, el ministro de Asuntos Exteriores, José Manuel Albares, ha asegurado este miércoles en el Congreso que “en cada ocasión” en que se encuentra con su homólogo polaco le plantea la situación del preso español. La última vez, ha precisado, fue el día 19, cuando se reunió con el nuevo jefe de la diplomacia polaca, Radoslaw Sikorski, en los márgenes de la reunión del Consejo de Asuntos Exteriores en Bruselas, y este quedó en hablar con su colega de Justicia. “Lo que pido desde el primer día es que de una vez por todas se presenten las pruebas que pueda haber, porque yo también salvaguardo su presunción de inocencia”, ha dicho Albares. “Yo no soy juez ni policía y, por tanto, no investigo, pero sí quiero que haya un juicio oral, contradictorio y público lo antes posible, y es lo que le he solicitado insistentemente al ministro de Asuntos Exteriores” polaco, ha añadido.

Albares ha señalado que en estos dos años el periodista ha recibido 17 visitas del personal de la Embajada española en Varsovia y ha añadido que, al tratarse de un país de la UE, su departamento se limita a prestar apoyo consular, ya que los órganos judiciales se comunican directamente entre sí y el margen de maniobra de los gobiernos es muy escaso.

Iñarritu ha recordado que la legislación polaca no establece ningún límite temporal para la prisión preventiva —que se puede prorrogar indefinidamente cada tres meses— y que la esposa del preso, Oihana Goiriena, solo ha conseguido visitarlo en dos ocasiones —en noviembre de 2022 y en junio de 2023—, mientras que este no puede comunicarse telefónicamente con su familia. Según ha explicado Goiriena, su marido está sujeto a un régimen carcelario muy severo, en una prisión a 70 kilómetros de la capital polaca, y solo tiene una hora diaria de paseo.

González, de 41 años, con tres hijos, es nieto de un niño de la guerra evacuado a Rusia durante la Guerra Civil. Nacido en Moscú, reside con su familia en Gernika (Bizkaia). Con motivo de cumplirse dos años desde su ingreso en prisión, las federaciones internacional y europea de periodistas han instado a las autoridades polacas a liberarlo “para que pueda defenderse ante los tribunales y garantizar que tendrá un juicio justo”. “Resulta intolerable que este periodista continúe en las cárceles polacas, la mayor parte del tiempo incomunicado, tras dos años de su detención”, ha declarado el presidente de la Federación de Asociaciones de Periodistas de España (FAPE), Miguel Ángel Noceda. Por su parte, Amnistía Internacional ha pedido al Gobierno polaco que facilite a Pablo González “información completa sobre los cargos que hay en su contra, finalice el régimen de aislamiento en el que lleva dos años, se revise su situación de prisión provisional” y se hagan efectivas todas sus garantías procesales, “incluido el respeto a su vida privada y familiar”.