Feijóo defiende la legalización de regadíos en Doñana porque Moreno Bonilla “busca una solución a centenares de familias”

El cambio climático, con los grandes partidos enfrentados por la sostenibilidad de una joya medioambiental como el parque de Doñana, al borde del colapso por la sequía y el estrés hídrico por los regadíos ilegales, ha abierto un nuevo frente entre el PSOE y el PP. El líder de la oposición, Alberto Núñez Feijóo, ha salido este jueves en defensa de la polémica decisión de la Junta de Andalucía de empezar a tramitar de forma exprés una ley que regularizará regadíos en el entorno de Doñana y que ha desatado una tormenta política y las críticas de ecologistas, científicos, la Comisión Europea y el Gobierno.

Feijóo ha defendido al Gobierno regional de Juan Manuel Moreno Bonilla, del PP, con el argumento de que está buscando soluciones para “centenares de familias”: las que viven de la explotación agrícola en el entorno del parque. El PSOE, que ha hecho de la bandera medioambiental uno de sus estandartes, se opone frontalmente a la legalización de casi un millar de hectáreas de regadíos ilegales. “El Gobierno va a hacer todo lo que sea preciso para salvar Doñana de las manos del PP y de Vox”, ha afirmado el ministro de la Presidencia, Félix Bolaños. El ministro ha acusado a la derecha y la ultraderecha “de querer depredar, como siempre y sin empacho, el medio ambiente”. “Haremos todo lo que haga falta para acabar con el terrorismo medioambiental del PP y Vox”, le ha secundado Alfonso Rodríguez Gómez de Celis, responsable de Política Municipal de la dirección federal del PSOE.

El dirigente socialista ha instado a Feijóo a que “ejerza por una vez su liderazgo y obligue al PP de Andalucía a rectificar” la propuesta para el futuro del parque que ayer inició su tramitación en el Parlamento autonómico. “Moreno está subyugado a lo que le va imponiendo la extrema derecha. Si no rectifica de una propuesta que va en contra de la normativa europea, va a denotar que Feijóo no tiene ningún liderazgo interno”, ha cargado Gómez de Celis. “Doñana no se toca”, ha apostillado, parafraseando a Pedro Sánchez en su mitin del miércoles en Burgos.

El presidente del PP se escuda en que los socialistas no dieron una solución a los agricultores del entorno de Doñana cuando gobernaban la Junta de Andalucía. “Desde 2014 se deja fuera de ordenación una zona que está a 30 kilómetros del parque de Doñana. Hay una situación de hecho y ante esta situación, la Junta de Andalucía quiere buscar soluciones. Por supuesto preservando la joya de Doñana, por supuesto garantizando los acuíferos del parque y por supuesto intentando buscar soluciones”, ha manifestado Feijóo, que ha reprochado al Gobierno Pedro Sánchez no haberlo hecho.

Gómez de Celis ha defendido que el PSOE andaluz, que se abstuvo en la toma en consideración de la misma iniciativa el año pasado ―la ley no se aprobó finalmente por el adelanto electoral― no ha variado su postura: “El PSOE no ha cambiado su posición, hablábamos de la toma en consideración, no del fondo, que siempre ha sido unánime: Nuestra posición es seguir defendiendo la actualización del plan de 2014, un plan consensuado que se estaba ejecutando y que de manera unilateral paró el PP y sobre todo Vox. Estamos con la normativa europea, con los dictámenes del Tribunal de Justicia de la UE, que dicen de forma muy clara que esta norma atenta y deja prácticamente secos los acuíferos”.

A mes y medio de las elecciones autonómicas y municipales del 28 de mayo, Feijóo se ha posicionado en favor de las familias que viven de la explotación agrícola del parque, desoyendo las críticas de los científicos y de los grupos ecologistas. Estos alertan de que la creación de nuevos regadíos solo propiciará más tensión en una zona que soporta ya una presión enorme y que ha hundido los niveles del acuífero del que se nutre el parque natural como nunca antes.

“El Gobierno, en vez de hablar sobre cómo solucionar los problemas de los centenares de familias que llevan desde 2014 sin ninguna solución y que tienen tierras a 30 kilómetros del parque, en vez de sentarse con la Junta, lo que hace es insultar al presidente de la Junta de Andalucía, llamarle señorito y decir que Andalucía es una esquinita. Honradamente, es muy difícil hablar con un Gobierno que insulta y que está de forma constante descalificando al resto de Administraciones públicas”, se ha quejado el líder del PP.

El jefe de la oposición acusa al Ejecutivo de Pedro Sánchez de “insultar” al presidente de Andalucía ―a quien la ministra de Transición Ecológica, Teresa Ribera, llamó el miércoles “señorito”― y le pide que se siente con la Junta de Andalucía para buscar una solución acordada. La proposición de ley objeto de la controversia inició su recorrido en el Parlamento andaluz con los votos de PP y Vox y se tramitará por la vía de urgencia, algo que acorta los plazos a la mitad. “Hay un problema, siéntense para arreglar ese problema, y lo primero que tiene que hacer el Gobierno es tener un mínimo de rigor en su política hidráulica, dejar de enfrentar a las comunidades autónomas y dejar de dejar tirados a centenares de familias que están buscando una solución. La Junta de Andalucía quiere buscar una solución para esas familias”.

Feijóo ha tratado además de corresponsabilizar al Ejecutivo del estado crítico del parque, que ha perdido la mitad de sus lagunas, por no haber construido infraestructuras para su conservación. “Lo que tiene que hacer el Gobierno es cuidar a Doñana. Lleva años sin hacer las infraestructuras que tenía que hacer para cuidarlo. Ahora nadie se cree que al Gobierno le importe Doñana porque lleva muchos años sin cuidar ese parque. Pido un poco de respeto entre las instituciones y que el Gobierno no venga insultando a todo el mundo”, ha instado el líder popular.