El PP lanza una ofensiva contra el PSOE por el ‘caso Mediador’ y registra una comisión de investigación

El PP quiere morder todo lo posible al PSOE por el caso Mediador, una red corrupta con epicentro en Canarias que se dedicaba a cobrar comisiones a empresarios, principalmente del sector ganadero y que de momento ha supuesto la expulsión del PSOE del exdiputado Juan Bernardo Fuentes Curbelo. Los populares han registrado este miércoles una comisión de investigación en el Congreso, después de haber solicitado las comparecencias de cuatro ministros ―los de Economía, Defensa, Interior y Exteriores― por dirigir los ministerios presuntamente adjudicatarios de contratos con la red en la que el diputado Fuentes Curbelo, apodado Tito Berni, ejercía de cabecilla junto con el mediador de la trama, Antonio Navarro Taraconte. El PP ha hecho de este caso el centro de su ofensiva de oposición al Gobierno y apunta también a Pedro Sánchez, de quien no descarta pedir también su comparecencia en el Congreso en su condición de presidente del grupo parlamentario socialista, afectado por el escándalo.

La secretaria general del PP, Cuca Gamarra, ha informado del registro de la comisión de investigación después de reunir en la sede del partido a las direcciones de los grupos parlamentarios del Congreso, Senado y Parlamento Europeo para coordinar la estrategia ante esta trama de corrupción que afecta al PSOE a tres meses de las decisivas elecciones autonómicas y municipales de mayo. “Es más necesaria que nunca una comisión de investigación que dirima las responsabilidades políticas de corrupción socialista lleno de mordidas, de drogas y de mujeres prostituidas”, ha subrayado Gamarra. “Es el momento de que el Congreso no mire hacia otro lado. Porque la trama actuaba en las instalaciones del grupo parlamentario socialista. Esto exige explicaciones y una investigación porque se está poniendo en duda la honorabilidad de los diputados y con eso no se juega”, ha remachado. “Quien preside el grupo parlamentario socialista es el presidente del Gobierno y secretario general del PSOE”.

El PP confía en el respaldo de “todos los grupos” a la comisión de investigación, pero la iniciativa cuenta con el rechazo de los dos partidos en el Gobierno, el PSOE y Unidas Podemos, lo que complica mucho que pueda salir adelante, porque tiene que pasar por la Mesa y la Junta de Portavoces del Congreso, donde estos grupos pueden vetarla. El portavoz del PSOE en la Cámara baja, Patxi López, ha afirmado este miércoles en Espejo Público que no la ven oportuna mientras está en marcha una investigación judicial. Mientras, el portavoz de Unidas Podemos, Pablo Echenique, calificó este martes de “gravísimo” el caso, pero avanzó que su grupo no apoyará ninguna comisión de investigación que pida el PP por considerar “una hipocresía” que las presente “uno de los partidos más corruptos del continente”.

Los populares han elevado el pistón contra el PSOE por este caso que “abochorna a toda la sociedad española”, en palabras de Cuca Gamarra, pero han pasado de puntillas por otros casos de corrupción que les afectan, como el caso Kitchen, a pesar de que la semana pasada se conoció que la Fiscalía Anticorrupción pide 15 años de cárcel para la cúpula de Interior del Gobierno de Mariano Rajoy después de que la investigación haya acreditado la utilización del Ministerio que dirigía Jorge Fernández Díaz para tapar la corrupción del PP. A la pregunta de si el PP siente el mismo escándalo sobre este caso que sobre el de Tito Berni, Gamarra ha contestado que en el de Kitchen “no hay nada nuevo” y “no es de actualidad”, porque tiene “más de una década”. En cambio, el caso Mediador “es de máxima actualidad y afecta al presidente del Gobierno”. El PP mantiene suspendido de militancia desde hace dos años al exministro Fernández Díaz, pero no ha adoptado nuevas medidas disciplinarias tras la acusación de la Fiscalía.

El PP quiere hacer bandera de la lucha contra la corrupción, pero en la rueda de prensa en la calle Génova por la causa que afecta al exdiputado socialista la secretaria general ha tenido que responder a múltiples preguntas de otros casos que les afectan. A Gamarra se le ha preguntado por qué el líder del PP, Alberto Núñez Feijóo, comió el pasado 26 de febrero en un acto de partido en Ibiza con el presidente del Consell de la isla, Vicent Marí, que ha sido citado a declarar después de que la Fiscalía Anticorrupción le acuse de prevaricación administrativa y tráfico de influencias. “Es un procedimiento administrativo en el marco de su actividad. No se puede utilizar la misma vara de medir. No tiene nada que ver una cosa con la otra”, ha contestado la número dos del PP, a quien le parece “muy bien” que Feijóo comiera con él.

Gamarra ha tenido que responder también por la alcaldesa de Marbella, Ángeles Muñoz (PP), a quien el Senado va a investigar si vulneró el Código de Conducta de las Cortes Generales al no declarar todos sus bienes al inicio de la reciente legislatura. Los socialistas lo pidieron unos días más tarde de que la regidora actualizase su declaración de bienes tras el procesamiento judicial de su marido y su hijastro. Ambos fueron detenidos en 2021 por, supuestamente, formar parte de una trama de narcotráfico y blanqueo de capitales en la Costa del Sol. “La alcaldesa de Marbella no tiene abierto ningún procedimiento penal”, ha justificado la secretaria general del PP.