Belarra llama a renovar el Poder Judicial y afirma que no hacerlo es “agachar la cabeza” ante el “golpe a la democracia”

Sin presencia ni preguntas de los periodistas, la secretaria general de Podemos, Ione Belarra, ha hecho este jueves su propio balance del año. Dos días después de la comparecencia del presidente Pedro Sánchez, la titular de Derechos Sociales ha difundido un vídeo en redes sociales en el que presume de los logros de Unidas Podemos en el Ejecutivo, reivindica su partido como motor de las transformaciones y vuelve a pedir una reforma legal que rebaje las mayorías necesarias para renovar el Consejo General del Poder Judicial (CGPJ), que lleva cuatro años en funciones. En un tono muy duro contra el PP, al que acusa de “secuestrar” las instituciones para “proteger a sus corruptos”, Belarra ha urgido a renovar el órgano de gobierno de los jueces porque no hacerlo, advierte, “es agachar la cabeza y aceptar que el CGPJ ha dado un golpe a la democracia española sin ninguna consecuencia”.

La ministra menciona entre los éxitos del año el último decreto de medias contra la crisis aprobado esta semana, la ley trans, el tope al precio del gas, la subida del salario mínimo o la norma que da derecho a paro a las trabajadoras del hogar, pero obvia (además de algunas iniciativas de Derechos Sociales) la principal medida impulsada por el departamento de la vicepresidenta Yolanda Díaz: la reforma laboral.

Parte importante del discurso de Belarra se ha centrado en la crisis desatada tras la paralización la semana pasada por parte del Tribunal Constitucional de la tramitación de la reforma que impulsaba el Gobierno para cambiar el método de elección de los vocales del órgano de garantías y cuyo nombramiento por parte del CGPJ finalmente se desbloqueó el pasado lunes. La secretaria general de Podemos se ha referido a la existencia en España de una “elite, pequeña pero muy privilegiada” que “vive de espaldas a lo que vota la gente” y que “quiere seguir demostrando que manda más que el presidente, el Gobierno y el Parlamento”. “Tenemos la obligación como demócratas de pararles los pies y de decirles muy claramente que en España no puede haber nadie por encima de la ley y por encima de la democracia”, ha afirmado.

Para la ministra, la renovación del Constitucional era necesaria para evitar que el PP lo “utilizara” para frenar leyes como la del aborto o la del solo sí es sí —es el único momento en el que ha mencionado una norma que provocó en noviembre una gran polémica por la rebaja de penas a algunos agresores sexuales tras su entrada en vigor—, pero cree que la crisis institucional “sigue abierta” e “irá a más”, por lo que pide que se renueve ya también el Poder Judicial. ”Creo que no hacerlo es agachar la cabeza y aceptar que el CGPJ ha dado un golpe a la democracia española sin ninguna consecuencia”, ha acusado Belarra antes de cargar contra el partido de Alberto Núñez Feijóo. “Es imprescindible que pongamos fin al secuestro de las instituciones por parte del PP, que solo persigue proteger a sus corruptos y conseguir a través de su brazo judicial lo que no consiguió en las urnas. Debemos diseñar un modelo de renovación del Consejo que se adapte a la nueva realidad política española y dejar atrás un sistema hecho a la medida del bipartidismo”, ha vuelto a reclamar la secretaria general de Podemos. Ante el bloqueo popular, el partido de Belarra aboga desde hace tiempo por reducir las mayorías necesarias en el Parlamento para la renovación del CGPJ, pasando de los tres quintos actuales a una mayoría absoluta y el apoyo del 50% de los grupos de la Cámara (lo que en este momento evitaría tener que contar con el apoyo del PP).

Logros y asuntos pendientes

Además de sacar pecho de los avances logrados en el último decreto contra la crisis, como la congelación del precio de los alquileres durante seis meses en aquellos contratos que se deban prorrogar de aquí a junio, la gratuidad de los abonos de cercanías y media distancia o la reducción al 50% en el transporte urbano, la ministra se ha detenido también en una de las normas estrella del ministerio de Igualdad, que dirige Irene Montero. ”La ley trans se ha convertido en un símbolo. Pocas leyes representan mejor que esta cuál es el aporte de Podemos dentro del Gobierno de coalición. Somos las fuerza que transforma, la que pone por delante de cualquier otra cosa los derechos y las necesidades de la gente”, ha reivindicado Belarra. Entre los hitos del Ejecutivo, la secretaria general de Podemos no ha incluido varias medidas impulsadas por su departamento (como el acuerdo de residencias, la inversión en dependencia o la ley de familias) ni tampoco la reforma laboral, de la que 24 horas antes hacía balance la propia Díaz al cumplirse un año de su aprobación en Consejo de Ministros. La norma, que ha logrado un descenso de la temporalidad hasta mínimos históricos, no obtuvo en su día el respaldo de otros grupos de la mayoría de investidura (como PNV, ERC o EH Bildu) y Podemos se mostró siempre tímido en su defensa.

“No es razonable que vayamos a entrar en el último año de legislatura sin ley de vivienda ni derogación de la ley mordaza”, ha reconocido de forma crítica Belarra. En el discurso ha habido espacio también para la apuesta por la diplomacia como fin a la guerra en Ucrania, pero se han pasado por alto los resultados electorales de UP —con sendos retrocesos en Castilla y León y Andalucía— o el ciclo político que se abre en 2023 y su primera parada en las municipales y autonómicas de mayo.