Sánchez contrapone la “ejemplaridad” y políticas sociales de su Gobierno cuatro años después de la moción de censura a Rajoy

La crudeza de los últimos audios divulgados por EL PAÍS de las cloacas del Estado ha irrumpido de lleno en la precampaña de las elecciones andaluzas. Pedro Sánchez ha reivindicado la “ejemplaridad” de su Gobierno a punto de que se cumpla el cuarto aniversario de la moción de censura en la que relevó a Mariano Rajoy. Lo ha hecho durante un mitin en Granada en el que ha repasado las políticas sociales del Ejecutivo frente a lo que su juicio ha sido una “oposición destructiva” del PP y Vox en la gestión de la pandemia y de la crisis económica por la guerra de Ucrania. “Cuatro años después de la moción, hemos cumplido con nuestro compromiso. Hoy España tiene un Gobierno social y ejemplar”, ha reivindicado.

De trasfondo estaban las grabaciones adelantadas por este diario en las que María Dolores de Cospedal, secretaria general del PP con Rajoy entre 2008 y 2018, recurrió a José Manuel Villarejo en los primeros meses de 2013 para tratar de impedir que se publicasen los papeles de Bárcenas. No es el único episodio de los audios que afecta a un referente de los populares: Esperanza Aguirre, expresidenta de Madrid, se reunió con el comisario para intentar archivar la causa contra ella por huir de la policía en 2014 tras aparcar en el carril bus de la Gran Vía. El Ministerio del Interior del último Gobierno del PP también avaló un informe falso de Villarejo contra el independentismo catalán. La sintonía adquirió tales proporciones que, según sugiere una grabación adelantada por EL PAÍS, el ministerio que dirigía Jorge Fernández Díaz protegió a Villarejo cuando se hizo público su patrimonio de 12 sociedades y 16 millones de euros.

Movilización en Andalucía

Las apelaciones a la ejemplaridad y el escudo social que el Ejecutivo de coalición ha desarrollado en los dos últimos años por el estallido de la pandemia y los efectos de la invasión de Ucrania tienen un motivo: tratar de movilizar al electorado progresista el 19 de junio en una comunidad que el PSOE ha presidido salvo la última legislatura. La preocupación de los socialistas pasa por agitar a su electorado más desafecto en Andalucía. El objetivo es colosal: los 400.000 votantes del PSOE que en 2018 se quedaron en sus casas y provocaron con su abstención el final de los 37 años de gobiernos socialistas en la Junta. El gran beneficiado fue Juan Manuel Moreno. El actual presidente andaluz y candidato del PP busca la reelección con una campaña plana para no sacar de su letargo a la izquierda. “El pueblo progresista de Andalucía se tiene que movilizar el 19-J. Si votamos, ganamos, si lo hacemos es porque no nos resignamos y porque somos muchos más que ellos”, ha instado Sánchez tras recordar las subidas del salario mínimo y de las pensiones o las mejoras introducidas con la reforma laboral, como el número de contratos indefinidos. En el acto en el Palacio de los Córdova, ante medio millar de simpatizantes y dirigentes como Santos Cerdán, secretario de Organización, le acompañaba el candidato Juan Espadas. “¡La maquinaria del PSOE no está engrasada, lo siguiente!”, ha reivindicado este último. “Claro que vamos a ganar, entre otras cosas porque las mujeres van a decidir que les represente un Gobierno con dignidad”, ha añadido.

En su segundo acto de precampaña -la semana pasada estuvo en Jaén y en campaña están previstos ya mítines en Almería, Málaga, Cádiz y Sevilla-, Sánchez no ha hecho ninguna referencia, indirecta o explícita, a la presencia del rey emérito en España. Juan Carlos I se verá este lunes en privado con Felipe Vi antes de su regreso a Abu Dabi.

Los socialistas han concentrado buena parte del discurso en la defensa y promoción de los avances sociales que benefician en especial a las mujeres. “Si tuvieramos que resumir de qué van estas elecciones es de derechos o derechas. Y los derechos los defiende el PSOE”, ha resumido Sánchez. “Da pena y alarma ver a una derecha y ultraderecha diciendo que son antifeministas, cuando el feminismo es una causa de derechos humanos. No entiendo por qué ideologizan algo que Naciones Unidas considera fundamental... Con los derechos ni se mercadea ni se banaliza”, ha cargado contra PP y Vox, que según las encuestas podrían formar su segundo Gobierno de coalición tras el precedente de Castilla y León. En esa línea se ha pronunciado Espadas: “La derecha lleva toda la vida queriendo ocultar la realidad, que la igualdad todavía no es real. Los socialistas queremos seguir trabajando para una sociedad en la que mujeres y hombres sean absolutamente iguales. Esa es la gran diferencia con las derechas. El 19 de junio tenemos que decidir si avanzamos o retrocedemos en derechos”.

Todas las intervenciones han girado alrededor de la igualdad. La más directa ha sido Olga Manzano, vicesecretaria general del PSOE de Granada. “En estas elecciones las mujeres vamos a ser clave. No admitimos retrocesos en nuestros derechos o las descalifaciones de la derecha a las asociaciones de mujeres llamándolos chiringuitos. El machismo nos sigue matando, por eso se llama violencia machista y no violencia intrafamiliar”, ha zanjado, en una nueva alusión a una de las banderas de Vox. Tras reivindicar la reforma de la ley del aborto aprobada esta semana por el Consejo de Ministros, Sánchez ha incidido en cómo la derecha recurrió al Tribunal Constitucional leyes como la de la interrupción voluntaria del embarazo -pendiente de resolver desde hace una década- o la ley de violencia de género.