España envía cuatro aviones cargados de armas para la “resistencia ucrania”

Cuatro aviones A400M de la Fuerza Aérea española trasladarán el viernes y el sábado decenas de toneladas de armamento y munición para apoyar la resistencia de Ucrania frente a la invasión rusa. Cuarenta y ocho horas después de que el presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, anunciara en el Congreso la entrega de “material militar ofensivo” al Gobierno de Kiev, el viernes saldrán dos aviones desde la base aérea de Los Llanos (Albacete), a los que seguirán otros dos el sábado. La OTAN ha pedido que no se revele el destino de los vuelos por razones de seguridad, ya que Moscú ha anunciado su intención de bombardear los convoyes que trasladan armamento para las Fuerzas Armadas ucranias. Se trata, en todo caso, de un aeropuerto polaco próximo a la frontera de Ucrania, donde el material será recogido por responsables del Ministerio de Defensa de Kiev.

Las Fuerzas Armadas españolas han rebuscado en sus arsenales para recopilar a toda prisa armamento fácil de transportar cuyo uso no requiera un adiestramiento imposible de prestar en estas circunstancias. El primer lote de material ofensivo donado a Kiev incluye 1.370 lanzagranadas contracarro (del modelo C90 fabricado por la empresa española Instalaza), 700.000 cartuchos, de fusil y ametralladora, y ametralladoras ligeras, según reveló la ministra de Defensa, Margarita Robles. El C90, de uso individual, con un alcance de 350 metros, resulta especialmente útil para pequeñas unidades dedicadas a frenar el avance de las columnas de blindados. Aunque no se conoce el volumen total del envío, cada avión A400M puede transportar 37.000 kilos de carga, por lo que serán decenas de toneladas de armamento.

El Gobierno decidió el martes la entrega de material ofensivo a Ucrania tras un debate en el que, además de los ministros socialistas, la vicepresidenta segunda, Yolanda Díaz, y el ministro de Universidades, Joan Subirats, apoyaron dar este paso, mientras la ministra de Derechos Sociales y secretaria general de Podemos, Ione Belarra, se pronunció en contra, según fuentes gubernamentales. Las mismas fuentes subrayaron, no obstante, que la dirección de la política exterior es competencia del presidente, Pedro Sánchez. Para entonces, más de 20 países de la UE (incluidos Francia, Alemania e Italia) habían anunciado el envío de armamento a Ucrania, lo que dejaba a España junto a una exigua minoría de países como la Hungría de Viktor Orban, uno de los pocos amigos de Putin en Europa, que incluso ha vetado el tránsito de las armas para Kiev por su territorio.

En teoría, a esta primera entrega deberían seguir otras, aunque fuentes militares advierten de que, tras los recortes presupuestarios de la última década, los polvorines de los ejércitos están bastante vacíos, por lo que habría que recurrir a las compras a las empresas. La UE ha puesto en marcha un fondo de 500 millones de euros para financiar la compra de armamento para Kiev (450 millones para material letal y 50 millones para defensivo), aunque aún no está claro cómo se coordinarán las entregas bilaterales para evitar duplicidades y carencias.

Hasta ahora, el Ministerio de Defensa español ha donado a las autoridades ucranias 20 toneladas de equipos de protección individual —5.000 cascos balísticos, chalecos antibala y trajes NBQ (Nuclear, Biológico y Químico)—, trasladados el domingo a Polonia en dos vuelos desde la base de Torrejón de Ardoz (Madrid). Además, España ha anunciado que aumentará en un 40% —de 350 a 500— sus tropas en Letonia bajo bandera de la OTAN.