Nace un nuevo partido de feministas “desencantadas” con el Gobierno de PSOE y UP

Un grupo de mujeres ha presentado este martes en el Ateneo de Madrid el partido FAC (Feministas al Congreso). Aseguran que recogen el sentir de feministas “actualmente huérfanas de representación política”, “muy enfadadas” y “desencantadas” con el Gobierno de coalición de PSOE y Unidas Podemos. Aspiran a presentarse a las próximas elecciones generales y llegar a futuras citas autonómicas y locales. Entre sus afiliadas (de las que aún no ofrecen cifras) hay exmilitantes de distintos partidos de izquierdas.

“El Ejecutivo denominado más progresista de la historia ha abandonado la agenda feminista y ha priorizado otras políticas que perjudican a la mitad de la población, las mujeres”, ha señalado Juana Gallego, vicesecretaria primera de la nueva organización, escritora y profesora de la Universidad Autónoma de Barcelona, que aspira a dar curso a ese “descontento” en los próximos meses y “convertir ese enfado en acción política”.

El germen de FAC surgió el pasado marzo, cuando lanzaron un manifiesto para poner en marcha un partido “pensado por y para las mujeres” con el que captaron la atención de más de 2.500 mujeres. En el centro de sus reivindicaciones está el último debate que ha abierto una gruesa brecha en el feminismo mundial: la conocida como autodeterminación de género, que una persona pueda cambiar nombre y sexo en sus documentos oficiales con solo su voluntad. Como han señalado antes plataformas como Contra el Borrado de las Mujeres o Confluencia Movimiento Feminista, en FAC consideran que supone un riesgo para las mujeres y pretende “convertir en irrelevante el sexo biológico” y que esconde “una eficaz arma para desactivar el feminismo”, ha añadido Juana Gallego.

El avance de la tramitación en España de la conocida como ley trans (actualmente pendiente de los informes de los órganos constitucionales, tras pasar en primera vuelta por el Consejo de Ministros) fue “sin duda” un acicate para que se constituyeran como partido político “para llegar al Congreso y defender nuestros derechos”, ha añadido Sandra Moreno, jurista y vicesecretaria segunda de FAC. Denuncia que estas iniciativas esconden “el desmantelamiento de la categoría jurídica de sexo, que es donde se construyen los derechos de las mujeres y las niñas”. Las integrantes del nuevo partido piden que se frene la tramitación de la ley y que se aborde con un debate “más sosegado”.

Entre las “líneas maestras” de su proyecto, tal y como las han definido, está combatir la violencia de género y la explotación reproductiva “en todas sus modalidades”, donde incluyen desde los vientres de alquiler a la donación de óvulos, abolir la prostitución o la lucha contra la “cosificación e hipersexualización” de mujeres y niñas. Preguntadas sobre la promesa del PSOE de elaborar una ley de corte abolicionista, se han mostrado escépticas. “El pacto de este Gobierno es no abolir la prostitución”, ha valorado la psicóloga Puri Lietor, secretaria general de FAC. “No nos toman el pelo más”.

El partido Feministas al Congreso tiene un precedente de organización política centrada en las demandas de las mujeres, el Partido Feminista, liderado por Lidia Falcón, que nunca ha conseguido representación parlamentaria nacional o autonómica. Las integrantes de FAC han señalado que aún es pronto para estimar cuál es la representación que podrían obtener, aunque saldrán “a ganar” en las próximas elecciones generales y prevén presentarse en futuros comicios locales y autonómicos.

La presidenta de FAC, la escritora y crítica de cine Pilar Aguilar, asegura que van a prestar “muchísima atención a las relaciones” con otros grupos feministas o militantes feministas de otros partidos. “El primer paso que vamos a dar es interpelar a todos estos grupos y hablar entre nosotras”, ha asegurado. Preguntada específicamente por si han contactado con Carmen Calvo (socialista y exvicepresidenta del Gobierno de coalición del que salió, entre otros motivos, por su rechazo a la ley trans), ha asegurado que están abiertas a todas las participaciones, pero que en ningún caso contemplan la posibilidad de una doble militancia.

Aguilar ha asegurado que no disponen de fondos económicos, pero esperan conseguir el respaldo de otras mujeres desencantadas con la política actual. “De broma decimos que a ver si alguna millonaria por ahí se convierte al feminismo de verdad y nos suelta un mogollón de millones”, ha ironizado.