El PP critica que Sánchez “ha vuelto a doblegarse ante Yolanda Díaz” por no cesar a Garzón

El PP no suelta la presa del chuletón. Los populares quieren estirar todo lo posible la polémica por las palabras del ministro de Consumo, Alberto Garzón, sobre las macrogranjas de ganadería que ha revivido las tensiones en el Gobierno, y centran su labor de oposición en este asunto con toda la artillería. Este miércoles, tras la reunión del comité de dirección, el secretario general, Teodoro García Egea, ha dedicado su intervención en rueda de prensa a cargar contra el titular de Consumo y a tratar de elevar el desgaste contra Pedro Sánchez por no haberle cesado. El líder socialista ha criticado el número dos del PP, “es un presidente a medias” porque “no tiene autoridad sobre su Gobierno” al no haber destituido al ministro de Unidas Podemos. “Ha vuelto a doblegarse ante Yolanda Díaz [vicepresidenta tercera y referente de Unidas Podemos]”, ha cuestionado García Egea. El PP da toda la prioridad a esta controversia y el viernes Pablo Casado reaparecerá tras su cuarentena por covid visitando una ganadería en Ávila.

El PP quiere hacer de la carne y la defensa de la ganadería el eje de la campaña en Castilla y León. La dirección nacional da la máxima prioridad a este asunto para ayudar a Alfonso Fernández Mañueco en su carrera a las urnas el próximo 13 de febrero, donde pelea con Vox y las candidaturas de la España vaciada por el apoyo en el mundo rural, en el que el sector de la ganadería tiene mucho peso. Una semana después de que saltara la polémica por la entrevista de Garzón en The Guardian, los populares siguen centrando en ello su labor de oposición, reclamando que el titular de Consumo salga del Consejo de Ministros. El PP quiere además agitar las divisiones que han aflorado entre los socios del Gobierno de coalición ―el presidente desautorizó al ministro de Unidas Podemos, a quien el ala socialista del Ejecutivo ha dejado solo― y este miércoles lo ha tratado de hacer describiendo a Sánchez como un presidente “débil” que no se impone sobre sus socios.

Se trata de desgastar al presidente socialista y de meter el dedo en la llaga de las tensiones internas del Gobierno. “Nos produce vergüenza que Sánchez diga que lamenta la polémica generada por Garzón. Nos preguntamos por qué no cesa Sánchez a Alberto Garzón. No valen lamentos, no vale ponerse de perfil”, ha censurado el secretario general del PP. El PP carga contra el ministro de Consumo porque es “la primera vez que un ministro habla mal de España fuera de España y de una forma tan explícita”. Garzón criticó en The Guardian el modelo de las macrogranjas, ya que producen, dijo, carne “de peor calidad” que además es fruto del “maltrato animal” y provoca “un impacto ecológico descomunal y desproporcional”. Preguntado por la contradicción que supone criticar a Garzón por “hablar mal de España” y que Pablo Casado haga declaraciones en Europa contra el Gobierno español o la marcha de la economía, el número dos del PP ha argumentado que “criticar la gestión del Gobierno de España no es criticar a España”.

García Egea también ha insistido en la negativa del PP a apoyar la reforma laboral pactada por los agentes sociales con el Gobierno, aunque la ha reducido a una “operación de maquillaje” que, sin embargo, ha criticado, “es lesiva para los trabajadores y la creación de empleo”. El PP responde a la pregunta de cómo pueden haber avalado empresarios y sindicatos una reforma que sea lesiva para la creación de empleo defendiendo que hay grietas en la posición de la CEOE, a pesar de que ha firmado la reforma.