Velas, difusores, jabones... Siete productos para que tu casa huela a lujo
El templo del hogar se ha convertido en el inesperado destinatario de los nuevos caprichos de la cosmética de alta gama. Es un efecto colateral de la crisis sanitaria de los últimos años, en los que la higiene ha sido una meta vital para muchos y en los que la residencia se ha transformado en refugio.
El sector de la perfumería y la cosmética de lujo ha encontrado un nicho en los artículos destinados al hogar. Desde velas o ambientadores hasta jabones para lavar los platos y fregar la cocina o detergentes para cuidar la ropa con esmero, antojos que llegan con el sello de prestigiosos perfumistas y en frascos tan exclusivos como su etiqueta. La demanda de estos productos se disparó en la pandemia, pero no ha echado el freno con el fin de las restricciones. “Hasta 2020 la categoría formaba parte de una compra cruzada con otros productos o como regalo”, reconoce Inma Fernández, directora de marketing de la tienda multimarca Isolée. “Actualmente los clientes nos visitan directamente con la intención de adquirir productos para el hogar”.
La vivienda se convirtió en un templo, y dedicarle lisonjas, en un capricho. “Los consumidores han invertido mucho más en la decoración de su casa, para hacer de ella un lugar acogedor y personal”, dice Enrico Sorenti, director internacional de ventas de Acqua di Parma. “El hogar se ha transformado en un espacio polivalente donde se puede trabajar, descansar, relajarse o entretenerse”.
La limpieza, que se mira con lupa desde que los virus pasaron a ser tema de conversación, cobra especial relevancia y hasta se apuntan a ella marcas ajenas. Es el caso de la firma francesa de fragancias Diptyque, que el pasado verano creaba una colección dedicada a ello, La Droguerie. “El cuidado del hogar se encuentra muy presente en nuestro día a día”, afirman desde Boxnox, la empresa que importa Diptyque en España; ellos señalan otro par de factores que terminan de explicar el cambio: la preocupación por la sostenibilidad y por los ingredientes sin químicos.
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