Un nuevo espacio marino en Las Palmas

Cerca de la emblemática Torre Woermann (1) se acaba de abrir al público el pasado 8 de enero, en el número 22 del Muelle del Sanapú de Las Palmas de Gran Canaria, el Acuario Poema del Mar (2), la nueva instalación en el archipiélago canario de los empresarios del zoológico Loro Parque y el parque acuático Siam Park (estas dos instalaciones, en la isla de Tenerife). El nombre está tomado de la famosa serie de cuadros de Néstor, el pintor simbolista cuyas extraordinarias obras se exponen en el museo (3) a él dedicado en la ciudad (en la calle de Francisco González Díaz, junto al hotel Santa Catalina), una visita cultural que ningún viajero debería perderse.

9.00 Tortugas de nariz de cerdo

Comenzamos el recorrido por el acuario (2) nada más abrirse al público por la mañana. Hay sorpresas para niños y grandes: el pez espátula, anguilas eléctricas, el pez Goliat, cocodrilos, lemures, el pez de cuatro ojos, la enorme raya tailandesa Himantura chaophraya, el milpiés, medusas, escorpiones, grandes pirañas negras, el pez paradox, tortugas de nariz de cerdo, el pez arapaima, tiburones de punta negra, cangrejos cocotero y el infalible pez payaso (en el que se inspiró Nemo).

Trescientas cincuenta especies entre peces, anfibios, reptiles y flora marina en 12.700 metros cuadrados de exhibición divididos en tres áreas temáticas: Jungla, Arrecife y Océano Profundo. Esta última cuenta con una gran ventana curvada de 36 metros. Situados en el centro, parece que el mar nos abraza. La visita dura dos horas y media. El acuario abre a diario de 9.00 a 18.00, y las entradas oscilan entre los 13 y los 25 euros.

Restaurantes como Qué Leche!, Deliciosa Marta y La Barra destacan en la oferta gastronómica de la ciudad

13.00 Una vinoteca singular

Las nuevas rutas turísticas de Las Palmas desgranan su arquitectura, los enclaves relacionados con Galdós y los rodajes de películas. De la plaza de Cairasco, escenario de filmación de la película Aliados, con Brad ­Pitt, tomamos la calle del Muro para adentrarnos en Vegueta (4). Aquí nació Las Palmas en 1478. Todo grancanario tiene su retrato de niño a lomos de los perros de bronce de la plaza de Santa Ana, frente a la catedral. Imposible no sentir sobresalto delante de la colección de 945 cráneos prehispánicos de la sala Verneau del Museo Canario (5) (Doctor Verneau, 2). Cerca también está la singular Vinoteca La Otilia (plaza de San Antonio Abad, 5), con restos de la sociedad de masones que la ocupó siglos atrás. El Centro Atlántico de Arte Moderno (6), del arquitecto Francisco Javier Sáenz de Oiza (Balcones, 11), y el Mercado de Vegueta (7) (Mendizábal, 1) son otros lugares recomendables.

11.30 Bollos de espuma

Cruzamos la calle comercial de Triana desde el Teatro Pérez Galdós (8). El principal coliseo de Canarias ofrece visitas guiadas. La zona está totalmente peatonalizada. Hay que visitar la Casa-Museo Pérez Galdós (Cano, 6), cuna del célebre escritor. Si se buscan joyas para lucir el cuerpo, los originales diseños de Topacio (9) (Triana, 27) nos seducirán. En Carlin (Triana, 52) hay bolis y libretas de todos los colores. Los golosos tienen cita con los bollos de espuma de Dulcería Parrilla (10) (General Bravo, 31). Y si busca ropa canaria tradicional, Arencibia (Triana, 66).

En Triana están las principales marcas, pero para conocer el talento local joven hay que extender la visita a Internet, donde se venden las camisetas de Paraíso Design, la moda desinhibida de Very Caliente Club, la ropa extragrande de Alter Ego o geométrica de Lita In Paradise, los diseños rompedores de Airam Barreto o tiernos de Charramanguina. Con ellos, de vuelta a la calle, referentes de la moda y tiendas como Nuria González (11) (Cebrián, 27), José García (Munguía, 3), Aurelia Gil (General Bravo, 27) y Totó & Co (Doctor Vicente Navarro Marco, 29, en Tafira).

14.30 40 kilómetros de carril bici

Cerca del quiosco modernista del parque de San Telmo hay un puesto de recogida de bicis municipales, ByBike LPA (12) (Agustín Millares Carló, 2A). La ciudad alcanzará pronto los 40 kilómetros de carriles con un total de 400 bicis gratuitas, algunas de ellas smart bikes. Subidos a una de ellas nos acercamos al Muelle Deportivo para comer. El acceso está frente al hotel Santa Catalina, emblemático cinco estrellas. Muchas embarcaciones de recreo forman parte hoy de la oferta de alquileres vacacionales de la ciudad. Elegimos la fideuá melosa de rabo de toro, crema agria y salsa de aguacate en Allende Muelle (13) (Centro Comercial Sotavento), pioneros en cocina de fusión en la ciudad. Luego, paseo por la playa de Las Canteras (14), el principal parque de la ciudad. Sus tres kilómetros se convierten con bajamar en un enorme y gratificante espacio para pasear entre piscinas naturales.

21.00 Tartar de remolacha

En la cena conoceremos a los nuevos talentos locales. Opciones a tener en cuenta son el ala de raya en escabeche negro canario con frutos rojos especiados y queque aireado de plancton de El Santo (15) (Pérez Galdós, 23), y el chipirón sahariano con pistacho, parmesano y emisión de jengibre y tinta de calamar de Qué Leche! (Torres, 22). También en Triana sobresalen el atún macerado de La Travesía (Lagunetas, 11) y el tartar de aguacates con langostinos en La Florinda (Cano, 19). Deliciosa Marta (Pérez Galdós, 33) y Grand Café (Pérez Galdós, 43) son locales de calidad superlativa. En Vegueta, imperdibles el ceviche de shiitake con aguacate, lima y puré de batata asada de La Hierba Luisa (Mendizábal, 39), y las croquetas de cigala con alioli de pera asada de Triciclo (Pelota, 12). Si estamos en Las Canteras, Karmacoma (16) (Secretario Padilla, 158) propone una sabrosa ensaladilla en un ambiente moderno. La Barra (Joaquín Costa, 25), del chef Ángel Palacios, recomienda el tartar de remolacha.

22.30 Terraza Tiramisú

En Triana, La Coqueta (17) (Cano, 30) es ideal para las primeras copas. Podemos seguir la noche cerca, en Shack (Cano, 17). En El Bote (Cebrián, 45) arranca la marcha alternativa de la ciudad. Sigue en el barrio de Guanarteme, en la terraza Tiramisú (Lepanto, 29). Por la playa, picoteo y marcha se combinan en el Mercado del Puerto (18) (Albareda, 76), siempre a rebosar. Chester (19) (Simón Bolívar, 3), la mejor discoteca de la ciudad, abre viernes, sábados y vísperas de festivo.