Templo para el ocio en Glasgow

Separada de la calle por un enorme patio de piedra, la parroquia de Saint Lukes (17 Bain Street), en el centro de Glasgow, ha mantenido durante años aspecto de alma en pena. Pero tras pequeñas alteraciones en sus rasgos originales, este templo hasta ahora moribundo ha recobrado el aliento vital para convertirse en espacio de ocio multifunción.

El templo, situado en el barrio de Calton, se inauguró en 1837 como iglesia de desahogo para dar cabida a los feligreses del distrito que no podían asistir a la parroquia principal. La edificación ha sabido sobreponerse no solo a los avatares de la tumultuosa historia de la iglesia escocesa (luchas internas, divisiones y reconciliaciones), también a los percances del destino, como el incendio de 1924 que destrozó la torre y parte de su ornamentación. Pero fue el descenso en el número de feligreses lo que forzó su cierre definitivo en 2012.

En esta segunda vida, Saint Lukes se divide en tres espacios. La sala de cultos del templo, al que se ha devuelto el esplendor de su piedra y el colorido de sus vidrieras, es ahora un espacio para eventos, celebraciones y conciertos. Cuando se usa como discoteca, el púlpito alberga la cabina del DJ. En la galería superior, ocupada ahora por dos bares, se exhiben objetos eclesiásticos que han sobrevivido al tiempo, como un antiguo cáliz y bancos reclinatorios casi intactos. Con el buen tiempo, el patio de entrada se convierte en terraza, pero el resto del año la actividad se concentra en The Winged Ox (El Buey Alado), antiguo salón de actos de la feligresía convertido ahora en café y restaurante, cuya mezcla de informalidad, variedad y calidad en su carta, junto a la amplia oferta de cervezas, le han ganado el favor de hipsters y gente del barrio a partes iguales.

En la actualidad, todos los detalles en las imágenes de marca de St Lukes transmiten una clara declaración de intenciones, un mensaje mezclado de tradición religiosa, modernidad laica y lucha social. A San Lucas Evangelista se le representa con auriculares y sosteniendo un disco de vinilo en sus manos. A modo de halo de santidad, le rodean la cabeza las palabras “Still I rise” (“Y aun así me alzo”), del famoso poema de la afro-americana Maya Angelou sobre la resistencia y el orgullo optimista ante los ataques de los grupos mayoritarios dominantes. La figura del Buey Alado, símbolo bíblico del evangelista representado en un fresco exterior de enormes dimensiones, “simboliza la fuerza y el espíritu de sacrificio tan característicos de esta zona de Glasgow”, dice el propietario del local con su aspecto de redentor barbudo.

Y es que St Lukes, imbuido de un sentimiento de humanidad, compasión y justicia, se ha puesto como cometido contribuir al resurgimiento de esta céntrica pero deprimida zona de Glasgow, tristemente famosa por tener la esperanza de vida más baja de Europa.

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