Bellezas plurales: nuevos usos para las viejas reglas

Janis Wilkins, de 65 años, empezó a trabajar como modelo con 62. Es uno de los personajes protagonistas del proyecto sobre belleza de la fotógrafa Camila Falquez para este especial. Lleva jersey de Prada, collares de Laura Lombardi y pendientes de Lihte Brand.fotografía de Camila Falquez / estilismo de Herin Choi

Lua Arroyo, activista afrocolombiana, defiende que no es necesario encajar dentro de un concepto de belleza que le parece limitado y limitante. Lleva un vestido de Issey Miyake, pendientes hechos a mano de Dorely y Laura Lombardi, y anillos de Limitee (en su mano izquierda y en el dedo índice de la derecha) y de Lihte (en el dedo anular de la mano derecha).fotografía de Camila Falquez / estilismo de Herin Choi

Neil es un músico que lleva más de 40 años llenando las calles de Chinatown con el melódico sonido del erhu o violín chino.fotografía de Camila Falquez / estilismo de Herin Choi

Jeffrey H. Williams defiende que la belleza contemporánea debe tener una cualidad disruptiva. Lleva vestido de Schiaparelli y sus propias joyas.fotografía de Camila Falquez / estilismo de Herin Choi

Lua Arroyo toca el chekeré en una rumba cubana en Brooklyn con el colectivo musical Musa Presents.fotografía de Camila Falquez / estilismo de Herin Choi

Saddia Udin, nacida en Estados Unidos, pero de familia bengalí, dice que la belleza está en los detalles y que, por ello, requiere de mucha atención, además de cuidado y paciencia. Lleva un vestido de Simone Rocha, zapatos de Marc Jacobs, dedal dorado de Schiaparelli y joyas propias.fotografía de Camila Falquez / estilismo de Herin Choi

Guadalupe y su esposo (el hombre de la siguiente foto) venden productos artesanales que traen de México en una pequeña plaza del barrio de Bushwick, en Brooklyn.fotografía de Camila Falquez / estilismo de Herin Choi

La presencia de esta pareja recuerda la belleza ancestral indígena que, aunque bajo amenaza constante durante cinco siglos, continúa sobreviviendo hoy.fotografía de Camila Falquez / estilismo de Herin Choi

Queen Jean. Es una de las portavoces más icónicas de las marchas que la comunidad afroamericana comenzó a organizar en Nueva York tras los asesinatos de Breonna Taylor y George Floyd. Su discurso alcanza patrones rítmicos que recuerdan a la música de tambores del Caribe. Lleva abrigo de Patrick McDowell, vestidos de Balenciaga y Marc Jacobs, y collares de Lihte, Vanessa’s y Lanvin.fotografía de Camila Falquez / estilismo de Herin Choi

Dione Simone baila música afrocubana en un parque de Brooklyn. Captó el interés de la fotógrafa por la elegancia con que se mueve y la alegría que desborda en cada uno de sus pasos.fotografía de Camila Falquez / estilismo de Herin Choi

Qing Princess of Chinatown es una artista multidisciplinar que el equipo de Camila Falquez conoció junto al río Este en una manifestación contra la ola de ataques racistas a miembros de la población asiática en Estados Unidos. Lleva un vestido de Jisoo Baik.fotografía de Camila Falquez / estilismo de Herin Choi

Una bailarina, en la rueda de danza de la Marcha de Liberación Queer por las Vidas Negras y contra la Brutalidad Policial celebrada el pasado junio en Brooklyn.fotografía de Camila Falquez / estilismo de Herin Choi

El músico jamaicano Orlando Carr, miembro del colectivo Musa de Brooklyn. Su ritmo se resiste a la velocidad despiadada de la ciudad. Hablar con él, explica Camila Falquez, es acceder a la belleza acompasada que solo florece con los años.fotografía de Camila Falquez / estilismo de Herin Choi

Debbie Hardy, propietaria de una tienda en Crown Heights, Brooklyn (un barrio con una numerosa comunidad de origen caribeño), cuenta que durante la pandemia aprendió a viajar en las arrugas de su madre.fotografía de Camila Falquez / estilismo de Herin Choi

Eunice Miller, una vecina de Brooklyn que captó la atención de Camila Falquez cuando estaba sentada con sus amigas y el sol del atardecer empezaba a disiparse.fotografía de Camila Falquez / estilismo de Herin Choi

Una bailarina abre la rueda de baile que se forma al final de la Marcha de Liberación Queer por las Vidas Negras y contra la Brutalidad Policial celebrada el pasado junio en Brooklyn.fotografía de Camila Falquez / estilismo de Herin Choi