Moda de otra dimensión

Viajar a otro mundo por caminos insospechados es uno de los grandes temas de la fantasía y la ciencia ficción. La madriguera de Alicia, las píldoras rojas y azules de Matrix o, incluso, un huevo marinado que salta de un bol de ramen rumbo a lo desconocido. Ese es el punto de partida del fashion film con que se presenta la nueva colección 7 Moncler Fragment Hiroshi Fujiwara, a la venta este 2 de julio.

El cortometraje, que ICON estrena en primicia, lleva la firma del director Genki Ito y está protagonizado por el actor y cantante japonés Tomohisa Yamashita, todo un fenómeno en redes con 5 millones de seguidores en Instagram. La acción comienza en un bar de ramen de Tokio y embarca al personaje principal en una aventura por el laberinto nocturno de la capital japonesa hasta introducirle en un entorno onírico. Allí, accede a una versión mejorada y más auténtica de sí mismo, que para el director es un buen símbolo del poder de la moda. “Nuestra vida cotidiana se construye a partir de una serie de decisiones, como elegir la Opción A o B que nos ofrecen, o crear una nueva Opción C para nosotros mismos”, razona el cineasta. “Nuestras personalidades e individualidades se componen a partir de esas elecciones infinitas, y pensar en ellas significa pensar en lo que somos para redefinir el sentido de nuestra existencia”.

En un entorno visual fascinante, marcado por gráficos que recuerdan a la informática de la era del MS-DOS y una banda sonora compuesrta por el propio Fujiwara, el cortometraje es una sugerente puerta de entrada a una colección que simboliza como pocas el devenir de los tiempos. Fragment es una plataforma que articula los proyectos colaborativos de Hiroshi Fujiwara, todo un mito del streetwear y la moda contemporánea que lleva tres décadas dando forma a la cultura urbana de Tokio. Introdujo el hip hop en Japón, esbozó por primera vez conceptos como el de las ediciones limitadas asociadas a sneakers y prendas de moda y atisbó el potencial de las colaboraciones antes que nadie. Con esos argumentos, no es extraño que le llamen “el padrino del streetwear”, título para el que reúne méritos más que suficientes.

Su proyecto de colaboración con Moncler debutó el año pasado y esta temporada regresa con una apuesta aún más radical. La colección se basa en las prendas de abrigo características de la marca, pasadas por un filtro retrodigital que no excluye la nostalgia analógica: ahí está, sin ir más lejos, la chaqueta Dwayne que luce el protagonista y que es el puente perfecto entre el pasado, el presente y el futuro. Un buen resumen de la filosofía que ha convertido a Moncler en una de las firmas más emocionantes de nuestro tiempo.