Si Saramago levantase la cabeza
Todos los días, al levantarme, repaso mentalmente la situación. Cientos de miles de contagios, miles de defunciones, ciudadanos que fallecen sin tener a su lado a sus seres queridos... Y después llegan las cifras actualizadas. Más miles de contagios de un día para otro. Más muertos. ¿De dónde salen esos contagios? ¿Cómo es posible que después de casi un mes de confinamiento ese virus destructivo siga colándose en los organismos de las personas? Y me acuerdo de las novelas magníficas de José Saramago, que tanto me han hecho disfrutar de situaciones insospechadas, trágicas, siniestras y dramáticas. El escritor las desarrollaba con maestría para que nos sintiésemos parte de la trama, y yo nunca sospeché que en un momento dado yo misma iba a pasar a ser protagonista de otra historia siniestra. Con la diferencia de que esta vez la historia es real.
Lola Pereira. Buenavista (Salamanca)
Tu suscripción se está usando en otro dispositivo
¿Quieres añadir otro usuario a tu suscripción?
Si continúas leyendo en este dispositivo, no se podrá leer en el otro.
FlechaTu suscripción se está usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PAÍS desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripción a la modalidad Premium, así podrás añadir otro usuario. Cada uno accederá con su propia cuenta de email, lo que os permitirá personalizar vuestra experiencia en EL PAÍS.
En el caso de no saber quién está usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contraseña aquí.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrará en tu dispositivo y en el de la otra persona que está usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aquí los términos y condiciones de la suscripción digital.