Cambio climático y activismo juvenil
Una adolescente de 16 años pone los puntos sobre las íes a los dirigentes mundiales —y los pelos de punta a muchos otros— que han asistido estos días a la cumbre climática en Nueva York afeándoles su escaso compromiso respecto al gravísimo problema del cambio climático. Greta Thunberg, de 16 años, pronunció un duro discurso en la inauguración de la cumbre que no debería pasar inadvertido para nadie. Las agujas del reloj del desastre climático están girando desde hace años. El tiempo para revertir la situación se agota. Pero desgraciadamente, la cumbre de Nueva York concluye con un insuficiente acuerdo entre 70 países. La juventud más precoz es la que está tomando conciencia y alzando la voz ante el problema que los Estados no son capaces de atajar. Y mucho me temo que Greta y otros muchos miles de jóvenes del mundo deberán ser quienes sigan tirando del carro de la concienciación ciudadana y de los Gobiernos.
José Manuel Fernández-Arroyo Castellano. Barcelona
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