5 gestos -y un reto- para conseguir una melena sana e hidratada (y reducir la factura del agua)
Según la Organización Mundial de la Salud gastamos 20 litros de agua durante cada minuto de ducha y cuando nos lavamos la cabeza se puede llegar a los 300. Por suerte, hay estrategias y productos que ahorran agua. ¡Y aumentan la salud del cabello!
Desenredado previo. Es obligatorio, y en el caso de las melenas rizadas o encrespadas más aún. Tiene su explicación. Cuando se desenreda bajo el chorro de agua de alcachofa o está mojado, el pelo pesa más y hay mayor riesgo de romperlo durante el proceso. Lo ideal es poner orden y eliminar los nudos antes de abrir el grifo y hacerlo con un cepillo plano de cerdas naturales. Hay que comenzar de medios a puntas y dejar para el final la zona de la raíz.
Cerrar el grifo. Al menos mientras enjabonamos. Es el mandato nº 1 para los seguidores del ahorro acuático. El lavado de cabeza implica dos champunadas (la primera para eliminar la suciedad y una segunda para aportar al cabello el cuidado cosmético) y a esto hay que añadir la aplicación del acondicionador o la mascarilla mientras se masajean los mechones. ¿Sumamos minutos? Con que solo fueran cinco, se pueden ahorrar alrededor de 100 litros.
El champú, sin siliconas. Estas se adhieren a la raíz y exigen más tiempo de aclarado. Además hacen que el pelo se ensucie antes y necesitemos más lavados. Se utilizan porque aportan una textura cremosa a los productos y dan suavidad y brillo al cabello. Sin embargo, también crean una película que impide que penetren los productos hidratantes, nutritivos o reparadores que se extiendan a continuación. También se terminan depositando sobre el cuero cabelludo, y tienen un efecto oclusivo que impide su oxigenación y los asfixia. Esto hace que el pelo se engrase y ensucie más rápidamente y que la melena pierda volumen.
En cuanto a la cantidad de producto necesaria, basta con el tamaño de una nuez, incluso menos si el cabello es fino. Utilizar más cantidad implicar aclarar durante más tiempo y el pelo coge más electricidad estática. Lo más recomendable además, es repartirlo sobre la cabeza y añadir después un poco de agua antes de comenzar a masajear.
La temperatura del agua sí importa. Y mucho. La recomendación de los especialistas de terminar el enjuagado con agua fría o tibia no solo hace que este sea más fácil y rápido, sino que fortalece la melena cerrando el poro. Hay que tener en cuenta además que las puntas en mal estado son más porosas y acumulan más producto que es más difícil de aclarar.
Utilizar productos de aclarado fácil. La textura es la clave y los productos más untuosos y los bálsamos añaden tiempo proceso de enjuague. Es cierto que aportan al cabello un mayor aporte nutritivo, pero en la actualidad existen productos que ofrecen máxima nutrición y acortan el tiempo de aclarado. Es el caso de la Mascarilla-Leche Original Remedies de Garnier, que supone un ahorro efectivo de 40 litros de agua en cada lavado frente a una mascarilla convencional. Se trata de un tratamiento de origen un 98% natural que nutre en profundidad –y a la carta- cualquier tipo de cabello, y que además ha incorporado una tecnología de aclarado ligero que permite una absorción inmediata y no deja residuos. Sus ingredientes se adaptan a cada problemática. ¿Pelo quebradizo? La Mascarilla-Leche Miel Reparadora desenreda al instante e infunde fuerza. ¿Deshidratación capilar? La Mascarilla-Leche Almendra Nutritiva apaga su sed al instante. ¿Rebelde y encrespado? La Mascarilla-Leche Cacao Disciplinante suaviza y disciplina. Sin apelmazamiento y sin residuos, Original Remedies acorta el tiempo de aclarado y mejora la salud capilar llenhando el pelo de vitalidad. La clave es que aúna el poder nutritivo de una mascarilla con la ligereza de una leche.
El ahorro de agua no es el único gesto de la firma en pos de la sostenibilidad. Los envases son 100% de plástico reciclable y la producción tiene lugar únicamente en fábricas sostenibles, sus ingredientes provienen de la agricultura ecológica y utiliza fórmulas veganas.
¿Ducharse con sólo 10 litros de agua?
Es posible y Garnier lo ha demostrado lanzando el reto #ElRemedioDelAgua. La iniciativa forma parte de los #RemediosOriginales, toda una declaración de la firma para concienciar sobre el consumo responsable y sostenible. Los niños son los protagonistas de la campaña y tratan de concienciar sobre la importancia de este recurso invitando a todos los que quieran a realizar un pequeño gesto que, llevado a gran escala, podría cambiar el mundo: ducharse con tan solo 10 litros de agua..
Para unirse al movimiento solo hay que entrar en la cuenta oficial de @Garnier_es #RemediosOriginales
Tu suscripción se está usando en otro dispositivo
¿Quieres añadir otro usuario a tu suscripción?
Si continúas leyendo en este dispositivo, no se podrá leer en el otro.
FlechaTu suscripción se está usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PAÍS desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripción a la modalidad Premium, así podrás añadir otro usuario. Cada uno accederá con su propia cuenta de email, lo que os permitirá personalizar vuestra experiencia en EL PAÍS.
En el caso de no saber quién está usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contraseña aquí.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrará en tu dispositivo y en el de la otra persona que está usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aquí los términos y condiciones de la suscripción digital.