Schwarzenegger y su hijo secreto: el final feliz de un gran escándalo
En 2011 la pareja más perfecta de Hollywood saltó por los aires al descubrirse que el actor había tenido un hijo fuera del matrimonio. Ocho años después, el drama se ha convertido en una tierna estampa familiar
4 de enero de 2011. Maria Shriver, periodista estadounidense y sobrina de John F. Kennedy y que había conocido a Arnold Schwarzenegger en 1977 y se había casado con él en 1986, sienta a su marido ante una terapeuta de parejas y le pregunta directamente si el hijo de la empleada del hogar que trabaja para ellos es suyo. El actor, gran estrella de acción en los ochenta y noventa y gobernador número 38 de California entre 2003 y 2011, no puede negarlo más. Lo admite. Terminan ahí 25 años de matrimonio.
Solo Mildred Baena y su madre supieron durante años quién era el verdadero padre de Joseph. En 2010 decidieron decírselo al joven (entonces de doce años). La respuesta del chico fue: "¡Qué guay!"
Los rumores y susurros eran habituales en la casa desde que Joseph Baena, hijo de Mildred Baena, empleada del hogar de origen guatemalteco, nació en 1997. Mildred llevaba desde 1991 trabajando con los Schwarzenegger en su mansión de la exclusiva zona de Pacific Palisades, en California. La aventura de Arnold (Thal, Austria, 1947) y Mildred (Guatemala, 1961) tuvo lugar, según la estrella contaría en sus memorias, en 1996, cuando estaba rodando Batman & Robin. En un giro propio de un melodrama televisivo, Baena se quedó embarazada de Arnold a la vez que su esposa Maria Shriver. Christopher (hijo de Maria) nació una semana después que Joseph (hijo de Mildred). El padre es el mismo: Arnold. ¿Otro giro? Baena estaba casada y, en el certificado de nacimiento, nombró a su marido desde hacía 10 años (Rogelio de Jesús) como el padre de Joseph. Un giro más: solo 21 días después del nacimiento de Joseph, Mildred le pidió el divorcio a Rogelio.
Solo Mildred Baena y su madre supieron durante años que la superestrella de acción era el padre de Joseph. En 2010, el parecido entre Joseph y Arnold ya era evidente y abuela y madre decidieron decirle al joven (entonces de 12 años) que Schwarzenegger era su verdadero padre. Según contó Baena posteriormente en una exclusiva con la revista Hello! en Reino Unido, la respuesta del chico fue: "¡Qué guay!".
El dos de octubre de 2018 el hijo de Arnold Schwarzenegger cumplió 21 años y su padre lo felicitó así en su cuenta de Instagram. "Ha sido fantástico ver cómo fortaleces tus músculos y tu mente".
Los rumores y susurros hicieron que aquel 4 de enero, un día después de que dejase el despacho del gobernador de Hollywood, Maria Shriver (que, como buena Kennedy, pospuso su drama personal en favor de la buena imagen política de su marido) se enfrentara a él. Y el resto es el escándalo mediático que ya conocemos y que surgió después.
Esta historia tenía muchísimas capas, pero una de ellas fue la social. "¿Por qué se ha acostado Arnold Schwarzenegger en una mujer tan poco atractiva?", titulaba cruelmente un artículo en la web de sociedad Hollywood Life. Y era uno de tantos. Baena es menuda y alejada de la belleza canónica de Hollywood. Y Arnold tenía una esposa esbelta, delgada y de porte casi aristocrático. El humorista George López imitó a Mildred en televisión con una peluca, grandes pechos falsos y representándola como una mujer interesada que hablaba mal inglés. El caso recordaba al de Hugh Grant, que mantenía una relación con una de las mujeres más deseadas del mundo (Elizabeth Hurley) cuando fue sorprendido en 1995 con una prostituta callejera en un coche. El debate era interesante por poner en tela de juicio nuestro entendimiento del deseo sexual: a veces tira por un camino inesperado y mucho más interesante. Los medios se apresuraron a hacer cábalas sobre por qué Arnold, que seguro que podía conquistar a una mujer más sexy según el gusto del gran público, eligió a Mildred. Casi nadie consideró que, tal vez, simplemente la encontraba atractiva.
El divorcio de Maria y Arnold no se anunció hasta unos meses después, el 9 de mayo. Se rompía una de las parejas más establecidas y queridas de Hollywood después de 25 años. El 16 de mayo de 2011 Los Angeles Times soltó la bomba: el motivo había sido que Arnold tenía un hijo secreto. Muy poco después Mildred daba una exclusiva a Hello! posando con su hijo, un movimiento que le valió muchísimas críticas.
Si era por dinero (ya que, lógicamente, Baena abandonó su trabajo tras hacerse pública la noticia) era posible que no hubiese necesidad: Schwarzenegger se había hecho cargo de la manutención del joven tras saber, a sus siete u ocho años, que él era el padre. Algo, según contó él, de lo que se dio cuenta de forma gradual al apreciar el parecido y hacer cuentas. Según la CBS, en 2010 Arnold compró una casa de cuatro habitaciones en Bakersfield (California) para Baena y su hijo.
En un giro propio de un melodrama televisivo, Baena se quedó embarazada de Arnold a la vez que su esposa Maria Shriver. Christopher (hijo de Maria) nació una semana después que Joseph (hijo de Mildred)
Si bien Arnold intentó mantener este asunto en secreto para no enfrentarse a los Kennedy, familia directa de su hoy exesposa, tras saltar el escándalo decidió dar un final muy de Hollywood a esta historia. Pasados los años, es habitual ver a padre e hijo pasear juntos por Los Ángeles y ambos presumen el uno del otro en Instagram. Arnold publicó la primera foto con él en 2016, el día de su 19 cumpleaños, y desde entonces publica todos los años una foto con su hijo en su aniversario acompañado de un cariñoso texto. Lo hizo también este fin de semana para celebrar su graduación.
Curiosamente, es este hijo (Arnold tiene otros dos hijos varones y dos mujeres que han optado por el cine, la moda o la literatura) el que ha seguido más de cerca los pasos de su padre en el mundo del culturismo y el deporte. En su propia cuenta de Instagram luce con orgullo fotos y vídeos de sus entrenamientos, así como estampas de una vida que parece acomodada y lo lleva por todo el mundo (ha publicado imágenes en el Camp Nou vistiendo la camiseta del Barcelona).
En octubre de 2016, cuando Joseph cumplió 19 años, Schwarzenegger lo sacó por primera vez en su Instagram. "Gran estudiante y gran atleta. Estoy orgulloso de ti y te quiero".
Baena, que lleva el apellido de su madre en vez de Schwarzenegger, nunca ha publicado una foto con ninguno de sus hermanos, lo que hace pensar que aunque la relación con su padre puede haberse arreglado con el tiempo, no tiene relación con los hijos de Arnold y Maria Shriver. Una búsqueda en Google deja una curiosa sinergia en esta relación: pese a que Joseph sigue a sus hermanos Patrick Schwarzenegger (actor, modelo e influencer) y Katherine Schwarzenegger (escritora y prometida con el actor Chris Pratt) en Instagram, ninguno de los dos lo siguen a él.
Su madre, Mildred Baena, llevó una vida alejada de los medios desde que saltó el escándalo y dio su única entrevista en 2011, pero reapareció en la graduación de su hijo (en dirección de empresas) el pasado fin de semana. Pero no hay foto de ella con Arnold. Pese a la buena relación que existe tras todos estos años entre padre e hijo, parece que los Schwarzenegger-Shriver y los Baena existen en dos realidades diferentes. Entre ellos se levanta ese muro insalvable que separa a los que posan para la foto en el glamuroso Hollywood y los que han de permanecer en la sombra. Joseph, a su manera, lo ha derribado.
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