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Columna
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¡Eh, abuelo, deja de ser un mierda!

Jóvenes activistas del clima exigen responsabilidad a los adultos

Eliane Brum
Greta Thunberg muestra el lema
Greta Thunberg muestra el lema HANNA FRANZEN (EFE)

Si has nacido a principios de siglo, descubres que vas a pasar los mejores años de tu vida en un planeta afectado por eventos extremos y te das cuenta de que los países estratégicos para combatir el cambio climático, como EE UU y Brasil, están liderados por Donald Trump y Jair Bolsonaro, ¿qué haces? Algunos imitan a los adultos, meten la cabeza bajo la almohada y piensan que la catástrofe solo va a recaer sobre los más pobres. Otros ya sienten los efectos y migran con sus familias porque las cosechas se malogran o el agua ha desaparecido. Y otros ya empiezan a hacer lo que los mayores deberían estar haciendo. Ante hombres y mujeres infantilizados, en muchos casos sus propios padres, y locos de extrema derecha que se reproducen por el mundo, lidian con los granos, las hormonas y el calentamiento global.

El número de niños y adolescentes que han decidido exigir responsabilidades a sus Gobiernos ha crecido. Saben que serán ellos y sus hijos, no los políticos actuales, los que vivirán en un planeta devastado. Con esta idea, la sueca Greta Thunberg, de 15 años, se negó a ir al colegio hasta que se celebraran las elecciones en su país, el pasado septiembre, para llamar la atención sobre la crisis climática. En el Parlamento, sus panfletos no podrían ser más claros: “Estoy haciendo esto porque a vosotros, adultos, os importa una mierda mi futuro”. Suecia dejaba atrás el verano más caluroso de los últimos 262 años, época en que la temperatura empezó a registrarse, marcado por olas de calor e incendios forestales.

El ejemplo de la sueca inspiró a los casi 15.000 estudiantes australianos que, el viernes, dejaron de ir al colegio para protestar contra el fracaso del Gobierno en el combate al cambio climático. El primer ministro, Scott Morrison, reaccionó: “Lo que queremos en las escuelas es más aprendizaje y menos activismo”. Los jóvenes respondieron en las calles: “Dejaremos de ser activistas si vosotros dejáis de ser unos mierdas”.

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En 2015, 21 niños y adolescentes ya habían sorprendido al mundo al demandar al Gobierno de EE UU por tomar decisiones que agudizan el cambio climático y vulneran sus derechos. En varios países hay demandas contra el Estado por no tomar medidas contra el calentamiento global y otras se presentarán en los próximos meses.

Thunberg escribió en un artículo: “Todos creen que podemos resolver la crisis sin esfuerzo ni sacrificio”. Con 15 años, demuestra la lucidez que falta en la mayor parte de los líderes mundiales cuando se realiza en Polonia la Cumbre del Clima (COP 24), en una coyuntura cada vez más desfavorable a acuerdos globales. Los adultos tienen suerte de que Greta y otros jóvenes estén en Katowice. La chica declaró en la apertura: “Como nuestros líderes se comportan como niños, nosotros tendremos que asumir la responsabilidad que ellos deberían haber asumido hace mucho”.

Traducción de Meritxell Almarza

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