_
_
_
_

Café Tacvba acompaña con música el camino de los migrantes

La banda mexicana ofreció un pequeño concierto por sorpresa para la caravana migrante que sigue su ruta hacia Estados Unidos

Integrantes de la caravana de centroamericanos llegan a Tijuana, en el estado de Baja California (México).
Integrantes de la caravana de centroamericanos llegan a Tijuana, en el estado de Baja California (México). Joebeth Terriquez (EFE)
Más información
14 canciones famosas sobre los problemas de los niños
El vocalista de Radiohead y Greenpeace, juntos para salvar la Antártida
Llega a España el documental sobre la polémica cantante británica Maya

La distancia de su largo camino no se mide solo en pasos. A sus espaldas, los miles de migrantes centroamericanos que hace meses pusieron rumbo hacia la frontera con Estados Unidos han cargado con el peso de sus sueños y con el cansancio punzante de los cientos de kilómetros recorridos. Pero también han recibido la solidaridad de muchas de las personas que se han encontrado a su paso. Hace una semana, su éxodo hizo parada en Ciudad de México y la capital se convirtió en un refugio en el que, por primera vez, muchos durmieron bajo techo. Les ofrecieron comida, agua y atención sanitaria. Solo faltaba una cosa: la música. Y también llegó.

La guitarra y la voz de Rubén Albarrán y Emmanuel del Real, de la banda mexicana Café Tacvba, se convirtió en algo más que una celebración para los caminantes que el pasado 7 de noviembre pasaron la noche en el estadio Palillo de Ciudad de México. Los dos componentes de una de las formaciones más destacadas del país latinoamericano pudieron escuchar las historias de algunos de los migrantes que, por sorpresa, acudieron a un íntimo e improvisado concierto en que la letra de la canción Las Flores se transformó en un grito de esperanza: “Invítame a sentarme junto a ti / Escucharé todos tus sueños en mi oído / Y déjame estrechar tus manos / Y regalarte unas pocas de ilusiones / Ven y cuéntame una historia que me haga sentir bien / Yo te escucharé / Con todo el silencio del planeta/ Y miraré tus ojos / Como si fueran los últimos de este país”.

Hace tiempo que el compromiso social marca el carácter de la banda, nutriendo su arsenal tacubo de canciones repletas de mensaje. Ahí está, por ejemplo, Ixtepec, un tema que bien podría haber sonado en este mini-concierto y que debe su nombre al sacerdote y activista mexicano Alejandro Solalinde, que lleva años brindado su apoyo a los migrantes centroamericanos indocumentados que buscan atravesar México, rumbo a Estados Unidos. La canción de Café Tacvba fue escrita hace más de 20 años, cuando aún no existía un auge mediático relacionado al drama del vía crucis migrante. Sin embargo, su letra habla de un viaje tan esperanzador, como largo y fatigoso.

Su último disco publicado, Jei Beibi (Melotrón, 2017), es uno de los trabajos más reivindicativos de la banda tacuba, un detonante sonoro contra la inacción política y el racismo que explota en canciones como Futuro o Disolviéndonos en el que lamentan la sociedad racista que levanta muros: “Puedes intentar odiar / el misterio / Puedes intentar tapar con un dedo el sol / Y la existencia”. Alzándose también contra la xenofobia, Albarrán apoyó su actuación con un improvisado discurso en el que exigía no criminalizar, ni discriminar a ninguna persona, “porque todos somos migrantes y no hay ningún ser humano ilegal”.

Su deseo también fue dirigido a quienes aún tienen travesía por delante y a los que todavía están por llegar. “Queremos utilizar la atención que podamos tener en los medios para darle la bienvenida a todos los caminantes, deseando que estén cuidados, protegidos, que los obstáculos se disuelvan y que lleguen bien al destino al que han decidido llegar”, finalizó antes de despedirse con Olita de Mar.

Así, a través de aquellas canciones, la música se convirtió, por unos instantes, en un carburante indispensable para el principal vehículo con el que viajan todos estos migrantes: un sueño. Ese que algunos ya han llegado a tocar en la frontera de Tijuana y otros, aún siguen midiendo en pasos, pero también solidaridad.

Puedes seguir a PLANETA FUTURO en Twitter y Facebook e Instagram, y suscribirte aquí a nuestra newsletter.

Tu suscripción se está usando en otro dispositivo

¿Quieres añadir otro usuario a tu suscripción?

Si continúas leyendo en este dispositivo, no se podrá leer en el otro.

¿Por qué estás viendo esto?

Flecha

Tu suscripción se está usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PAÍS desde un dispositivo a la vez.

Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripción a la modalidad Premium, así podrás añadir otro usuario. Cada uno accederá con su propia cuenta de email, lo que os permitirá personalizar vuestra experiencia en EL PAÍS.

En el caso de no saber quién está usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contraseña aquí.

Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrará en tu dispositivo y en el de la otra persona que está usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aquí los términos y condiciones de la suscripción digital.

Más información

Archivado En

Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
_
_