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Claire Foy: “No me puedo creer que Elton John sepa quién soy”

La actriz que ha saltado a la fama por 'The Crown' rehúye de la fama aunque reconoce algunos de sus beneficios

La intérprete Claire Foy, en los Screen Actors Guild Awards celebrados en Los Ángeles en enero.
La intérprete Claire Foy, en los Screen Actors Guild Awards celebrados en Los Ángeles en enero. REUTERS
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Claire Foy insiste en que nadie la reconoce por la calle. Ni siquiera en Londres, donde ya había despuntado en series británicas desde 2008 (Little Dorrit, The Promise, Upstairs Downstairs) antes de su éxito mundial como una joven reina Isabel de Inglaterra en The Crown. Dice que es porque justo después de rodar el show de Netflix tuvo que teñirse de rubia. “Creo que es porque parezco alguien normal, como la hermana o prima de alguien”, se justifica. También puede ser porque esa piel blanca y sus grandes ojos son absolutamente camaleónicos. Y, definitivamente, tiene que ver con su sellada privacidad y su falta de interés en tener una vida social pública que se traduce también en su nula presencia en las redes sociales.

Cuando no está rodando, que en los dos últimos años ha pasado pocos días, Foy (1984, Stockport) se encierra en su casa del barrio londinense de Wood Green con su marido, el también actor Stephen Campbell Moore (les han llegado a llamar los Brangelina ingleses), y su hija de 2 años.

La actriz Claire Foy caracterizada como la reina Isabel II en la primera temporada de 'The Crown'.
La actriz Claire Foy caracterizada como la reina Isabel II en la primera temporada de 'The Crown'.cordon press

Foy estaba embarazada de casi seis meses cuando hizo el casting para The Crown. Y cree que su estado tuvo que ver con conseguir el papel. “Estaba totalmente distraída”, recuerda. A pesar de que empezó a trabajar prácticamente al salir de la escuela de interpretación, la actriz está convencida de que conseguir este tipo de proyectos tiene que ver más “con la suerte que con el talento”. Quien ha trabajado con ella hasta ahora lo niega. Cuando llegó al plató de The Crown, lo hizo como madre primeriza con una bebé de cuatro meses a la que daba el pecho en cada descanso. Nuevamente, vuelve a ver como algo afortunado poder compaginar su maternidad con el trabajo. “Mi trabajo me permite algo así”, asegura. Pero también fue una prueba de profesionalidad que se ha sumado a la buena reputación que se ha labrado en la industria.

Antes de estrenarse hace un año como la reina Isabel, en Reino Unido Claire Foy ya era una cara familiar hasta el punto de que la prensa inglesa la había llegado a describir como “la nueva Sienna Miller” o “la nueva Keira Knightley”. Algo a lo que la actriz siempre se resistió. “La fama me parece algo abstracto que no creo que me llegue”, decía hace siete años, cuando negaba esas comparaciones. “Sería terrible ser Sienna o Keira y acabar convertida en una persona perseguida por paparazis, me gustaría tener sus carreras pero no lo que las acompaña. Hay demasiada obsesión con la apariencia en Hollywood”.

Claire Foy, con el Globo de Oro como mejor actriz de drama de televisión por su papel en 'The Crown'.
Claire Foy, con el Globo de Oro como mejor actriz de drama de televisión por su papel en 'The Crown'.cordon press

Ha contado que, aunque le encante la ropa y le obsesionen las revistas de moda, arreglarse para las alfombras rojas le “resulta extraño”. Ella perdió su obsesión por su aspecto cuando a los 17 años le salió un tumor benigno en el ojo que le desfiguró la cara y, asegura, le ha dejado “uno distinto del otro”. “Algo así te da perspectiva, ya no pasas tanto tiempo mirándote al espejo”, ha contado. Una experiencia que también le hizo agarrarse a la vida y lanzarse a probar suerte como actriz.

Ahora, después de haber ganado un Globo de Oro, a unas semanas de estrenar la segunda y su última temporada de The Crown y con su primera película post Netflix ya estrenada, Una razón para vivir, junto a Andrew Garfield, esa fama que no veía llegar ya lo ha hecho. “Es una locura, no me puedo creer que gente como Elton John o Helen Mirren sepan quién soy por mi trabajo”, dice. Mirren, con quien comparte el papel de reina de Inglaterra, le escribió una carta de felicitación “con palabras increíbles que no tenía por qué decir”.

De izquierda a derecha: el productor Jonathan Cavendish, los actores Andrew Garfield y Claire Foy y el director de 'Una razón para vivir' Andy Serkis.
De izquierda a derecha: el productor Jonathan Cavendish, los actores Andrew Garfield y Claire Foy y el director de 'Una razón para vivir' Andy Serkis.cordon press

Ha trabajado ya con Steven Soderbergh y está rodando a las órdenes de Damien Chazelle (La La Land) en un biopic sobre Neil Armstrong en el que Ryan Gosling será el astronauta y ella interpreta a su esposa. Y, en cuanto acabe ese rodaje, se meterá en la piel de Lisbeth Salander, la nueva encarnación de la antiheroína de la saga Millennium.

Probablemente tiene uno de los presentes y futuros más prometedores de la industria, pero Foy insiste en que no piensa en la fama y el único lujo que se ha permitido es un piano de segunda mano. “Llevo tiempo en esto, lo he visto desde fuera y sé cómo funciona, sé que es muy variable. La gran diferencia es la gente con la que puedo hablar ahora y los papeles para los que me consideran”, sostiene. Que no la reconozcan por la calle ni la persigan los paparazis le ayuda a sentir que nada ha cambiado en su vida.

Claire Foy y su marido, el actor Stephen Campbell Moore, en unos premios en mayo de 2012.
Claire Foy y su marido, el actor Stephen Campbell Moore, en unos premios en mayo de 2012.cordon press

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