ICON DESIGN: diseño contra el calor
El lanzamiento de esta nueva publicación semestral reunió en Madrid a personalidades de las artes y el diseño en una de las noches más torridas del año Fotogalería 1: Ximena & Sergio retrataron a nuestros invitados Fotogalería 2: La llegada de los invitados Fotogalería 3: La fiesta
En uno de los textos del primer número de ICON DESIGN, el periodista británico Stephen Bayley define el estilo decorativo de Donald Trump como recargado, desvergonzadamente ostentoso y toda una declaración de principios. ¿Y qué principios son esos? “Para Trump, la estética que eliges solo vale para expresar el grado de poder y éxito económico que has conseguido. En cierto contexto, el mármol rosa y el cristal salmón no son materiales inofensivos”, contaba ayer Lucas Arraut, director de la nueva revista. “Los interiores, la decoración, el diseño y, por supuesto, la arquitectura dicen tanto o más de los hombres que cómo visten y hasta que lo que dicen. Ese es uno de los motivos por los que nos hemos embarcado en esta publicación”.
ICON DESIGN es la revista de diseño, arquitectura e interiorismo de ICON, y se distribuye dos veces al año con EL PAÍS, además de venderse en quioscos. Cuenta con firmas como el fundador de Wallpaper y Monocle Tyler Brûlé, el ilustrador Jordi Labanda o el propio Bayley y fotógrafos como Simon Watson, Nacho Alegre, Pep Escoda o Pablo Zamora. Y como mandan los cánones en el sector, su nacimiento requería una puesta de largo. Ocurrió anoche, una de las noches más calurosas del año, en la Fundación Lázaro Galdiano de Madrid. "Una revista no es más que una excusa para publicar fotos bonitas de gente interesante", explicaba su subdirector, Daniel García, "pero teníamos ganas de dejar que sus espacios también hablasen, ver qué sillas o qué sofá tienen los personajes que retratamos, cómo tiene los libros... Al final, ICON DESIGN es la venganza de las sillas, los libros y los sofás".
Fotogalería 1: Ximena & Sergio retrataron a nuestros invitados (pincha en la foto)
En esto, en la importancia del diseño y en la necesidad de empezar a reconocerlo y aprender a quererlo, coincidían muchos de los 300 invitados que pasaron por el jardín del museo. Grandes rostros del diseño, el interiorismo y la arquitectura, de la moda y las artes o de la gastronomía: de Ramón Freixa a Alfonso Bassave, pasando por Tomás Alía, Pascua Ortega, Jordi Cruz, Oriol Elcacho, Samantha Vallejo-Nájera, Jesús Cano, Félix Sabroso, Jordi Labanda, Cristian Zuzunaga, Jorge Suquet, Beatriz Silveira, Eduardo Petrossi, Clara Courel, Teresa Sapey, los Alvarno o nuestro imprescindible Mario Vaquerizo.
A la entrada del jardín algunas de las luminarias del diseño daban la bienvenida a los invitados. Allí estaban custodiando la entrada los geniales Eames, Mariscal, Milá (quien, por cierto, protagoniza una de las entrevistas del primer número de la revista) Starck o Jacobsen. Sin olvidar a Ferdinand A. Porsche, el hombre que ideó ese coche tan icónico –el Porsche 911– por el que media humanidad no ha dejado de suspirar desde que se creara en 1963.
Porsche hace tiempo que decidió poner su maquinaria al servicio de otros objetos de deseo que no fueran solo los coches y bajo el nombre de Porsche Design, la marca que creó el primer reloj de tinanio presentó anoche su nuevo modelo, el Monobloc Actuator. La firma de mármoles Nerinea fabricó para la ocasión un 'photocall' en mármol. Y Ron Diplomático y Mahou Maestra se encargaron de alegrar –un poco más– la noche. Cosa a la que contribuyó la actuación de ELE que no cumplió afortunadamente –o no, nunca se sabe– el título de su primer álbum 'Summer Rain'. Pero los que hicieron que, definitivamente, la fiesta empezara de verdad y sin solución de continuidad fueron los dj’s El cuerpo del Disco, culpables de que más de uno dejara una conversación a medias para ponerse a bailar. Detalles que marcan la diferencia. Porque, como bien decía Charles Eames, los detalles no son detalles, son lo que definen el diseño.
Fotogalería 2: La llegada de los invitados (pincha en la foto)
Fotogalería 3: La fiesta (pincha en la foto)
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