¿Cómo unos vaqueros pringados de barro pueden costar 400 euros?
Una marca de lujo va un paso más allá y lanza unos pantalones tan sucios que ya no hace falta lavarlos
Exactamente cuestan 413,72 euros. Se trata de un vaquero azul, con cinco bolsillos, como suelen tener estos pantalones, y de corte recto, a la manera tradicional. Lo excepcional en este modelo no es solo que se trate de una prenda de una marca de lujo -PRPS- cuyos precios oscilan entre los 400 y los 700 euros, sino que tienen barro. Sí, has leído bien, tiene esa mezcla de agua y tierra que casi el común de los mortales evita en su ropa y frota con ahínco para sacarlo cuando se mancha. Pues lo estábamos haciendo mal: estábamos cometiendo sin saberlo un atentado contra la moda.
Se trata de un paso más allá de los vaqueros -cada vez más- rotos o de las camisetas salpicadas de pintura que se venden a precio de obra original de Pollock. La marca se llama Nordstrom y así defienden su original creación: "Estas prendas evocan la ropa que llevan los obreros americanos que trabajan duro sin miedo a ensuciarse".
Así que Internet ha reaccionado como suele hacerlo en estos caso: riéndose de ello. Los comentarios han sido borrados por la marca, pero antes los recogió la web de la radio pública estadounidense. Según un irónico usuario, estos vaqueros imitan el trabajo duro “sin tener que dejar nunca mi BMW”. Twitter también ha servido de escaparate para los más críticos con la arriesgada prenda. "Si alguien siente la necesidad de comprarse los vaqueros embarrados de Nordstrom, que se compre un par normales y yo le tiro barro encima gratis", comentaba un usuario de la red social.
Estamos hablando de una marca acostumbrada a diseños atrevidos. La firma de lujo, que el exdiseñador de Nike Donwan Harrell fundó en 2002, oferta vaqueros “destruidos” cuyas manchas enmarcan en “arte abstracto” y que cuestan igualmente 413 euros, o chaquetas con manchas de barro “profundamente empapadas”; por el mismo precio.
Pero eso sí, no creáis que esas manchas, esos rotos o esos blanqueados están dispuestos en la prenda sin ningún orden. Los diseñadores de PRPS lo explican: “Ningún detalle, por minucioso que sea, pasa por alto”. Los vaqueros se fabrican con algodón orgánico japonés o de Zimbabue ,“con un proceso futurista que replica el robusto desgaste de antaño”.
Si te preocupa que el barro termine abandonando los vaqueros tras los lavados, no te preocupes. En Nordstrom aseguran que pueden lavarse a máquina, siempre que sea con agua fría y se dejen secar al sol, sin que pierdan ninguna de sus características manchas. Un momento: ¿hemos dicho lavar? Para qué, si ya están sucios...
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