_
_
_
_
Porque lo digo yo
Columna
Artículos estrictamente de opinión que responden al estilo propio del autor. Estos textos de opinión han de basarse en datos verificados y ser respetuosos con las personas aunque se critiquen sus actos. Todas las columnas de opinión de personas ajenas a la Redacción de EL PAÍS llevarán, tras la última línea, un pie de autor —por conocido que éste sea— donde se indique el cargo, título, militancia política (en su caso) u ocupación principal, o la que esté o estuvo relacionada con el tema abordado

¡Silencio!

Cada día vamos a menos mucho más, y es por el ruido

Miren Gaztañaga en una captura de un programa de la ETB.
Miren Gaztañaga en una captura de un programa de la ETB.
Borja Hermoso

Cada día vamos a menos mucho más, y es por el ruido. Bueno, también por otras cosas como la mera posibilidad de que un cuatrero con gomina vaya a escapar de la cárcel de Tucson ¿o era Alcalá Meco? O que Lydia Lozano y Kiko Matamoros sigan saliendo en la tele porque es lo que pide la gente… ¿o era al revés? ¿qué era antes, el huevo o la gallina, signore Vasile? O que triunfe Trump.

No le hace falta sonido incorporado, ni siquiera estruendo. Al ruido, queremos decir, no a Trump, él lo lleva de serie. Hay ruidos sordos. El narcisismo sin remedio e ignorante (siempre inconsciente, ellos creen que son Kant) de tanto pelagatos en las redes. La sonrisa idiota de la actriz Miren Gaztañaga diciendo que los españoles son culturalmente atrasados en ese programa de la televisión vasca cuyos primeros avergonzados son los vascos normales. El ruido callado de todo dios a bordo de un móvil en el vagón de metro. El de los nenes quitándote el iPhone para ver vídeos en cuanto vas a mear… ¡perdón!, quería decir quitándote la tablet.

Somos ruido, así lo hemos querido, y nuestra misión es decir, decir, decir. De escuchar ya se encargarán otros. Pero nunca es tarde. ¿Han leído los poemas de Karmelo Iribarren? Harían bien. En uno de ellos, El protocolo del cinismo, escribe: “Un silencio/ vulgar/ sin contenido”. Eso presupone lo contrario y obvio: que hay silencios plagados de deseo, razón y refugio. Todos juntos, a la de tres y con exclamaciones: ¡Silencio!

Tu suscripción se está usando en otro dispositivo

¿Quieres añadir otro usuario a tu suscripción?

Si continúas leyendo en este dispositivo, no se podrá leer en el otro.

¿Por qué estás viendo esto?

Flecha

Tu suscripción se está usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PAÍS desde un dispositivo a la vez.

Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripción a la modalidad Premium, así podrás añadir otro usuario. Cada uno accederá con su propia cuenta de email, lo que os permitirá personalizar vuestra experiencia en EL PAÍS.

En el caso de no saber quién está usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contraseña aquí.

Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrará en tu dispositivo y en el de la otra persona que está usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aquí los términos y condiciones de la suscripción digital.

Sobre la firma

Borja Hermoso
Es redactor jefe de EL PAÍS desde 2007 y dirigió el área de Cultura entre 2007 y 2016. En 2018 se incorporó a El País Semanal, donde compagina reportajes y entrevistas con labores de edición. Anteriormente trabajó en Radiocadena Española, Diario-16 y El Mundo. Es licenciado en Periodismo por la Universidad de Navarra.

Archivado En

Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
_
_