El divo Cristiano

Hace una semana Cristiano Ronaldo subía una foto a Instagram en la que aparecía con el torso descubierto luciendo únicamente un abrigo sobre sus hombros. No es la primera imagen suya desnudo de cintura para arriba que el portugués ha compartido en estos años con sus más de 80 millones de seguidores, pero esa en concreto ha causado un especial revuelo.

El crack portugués del Real Madrid posaba con una mirada entre sexi y desafiante, como si fuese un tipo duro y al mismo tiempo una deidad entre lo apolíneo y lo hercúleo. Un Adonis millennial que a juzgar por las reacciones a dicha foto fue interpretado más bien como un Narciso. Una de las cuentas de Twitter del Bayern de Munich respondía a la publicación con un vídeo de uno de sus jugadores, el español Javi Martínez, intentando imitar la mirada de Ronaldo y soltando una carcajada. El delantero inglés Peter Crouch organizó un concurso entre sus seguidores para que le retuitearan si querían que publicase su propia versión de la foto del portugués. Muchos de los comentarios en el perfil de Cristiano Ronaldo también se mofan y le acusan de tener un ego desmedido y de quererse demasiado. Otros señalan que es un incomprendido, y que está derribando estereotipos masculinos mientras comparte el mismo número de contenidos relacionados con causas solidarias. Estos últimos días ha subido más fotos del estilo de la del abrigo, dejando claro que, le pese a quien le pese, no va a dejar de ser Cristiano Ronaldo.

Cristiano ha elevado a un nuevo nivel la metrosexualidad que inauguró David Beckham hace 15 años. Las redes sociales, y por tanto la posibilidad de compartir cada aspecto de la vida, han contribuido a ello. Ronaldo se cuida tanto o más que el icono de estilo inglés, pero nunca vimos un selfie de 'Becks' con toda la cara llena de plásticos aplicándose un tratamiento facial. Cristiano lo hizo hace dos semanas. La mayoría de comentarios eran emoticonos de risas, pero muchos otros decían que aquello era "cosa de mujeres”. Y otros tantos (perfiles de chicos) preguntaban qué era eso que estaba haciendo el portugués porque no lo habían visto en su vida. El ídolo de millones de hombres heterosexuales en todo el mundo mostraba que se puede ser un portento físico que marca goles de tres en tres y al mismo tiempo cuidarse el cutis sin que ello ponga en peligro su masculinidad.

La foto de la mascarilla llegó un día después de la del coche. Ronaldo presumía de deportivo, un Lamborghini de 350.000 euros. Su pose, con los brazos separados del cuerpo como si estuviese a punto de desenfundar dos pistolas, dio lugar a una infinidad de memes. Una imagen que ha alternado con otras como él junto a una cabeza gigante de Buda o él en su faceta más tierna, junto a su hijo en la cama. Porque Cristiano es padre soltero, y desde su ruptura con la modelo rusa Irina Shayk hace casi dos años cría a su pequeño solo, algo que también podría identificarle con ese nuevo tipo de hombre, moderno e independiente que no necesita a una mujer para que le ayude en los quehaceres cotidianos.

Que Cristiano no tiene problemas de autoestima salta a la vista. Él mismo se definió hace años como un hombre guapo, rico y exitoso que generaba envidias por ello. Hace cuatro días publicaba otra foto con el torso al aire, recostado y con los ojos cerrados. El mensaje que el portugués quería lanzar con ella puede extraerse de los comentarios de sus followers. “Hasta dormido eres perfecto”, “nadie es tan guapo mientras duerme” o “eres un Dios” fueron las reacciones más repetidas de las 18.000 que provocó una imagen que acumula un millón y medio de ‘me gusta’.

Él ejerciendo de modelo para su colección de ropa interior y de calzado, un bote de champú que también promociona o lo último, una línea de mantas y cubrecamas han sido sus últimas publicaciones en Instagram. Respecto a las mantas, todas ellas llevan su nombre ocupando prácticamente el alto y ancho del tejido. Otras llevan una silueta suya casi a tamaño real con la postura que el astro del balón ejecuta tras celebrar un gol. Cristiano no se ha olvidado de compartir los tres que marcó la semana pasada ante el Alavés o el premio que recibió esta semana por su actuación en la Champions la temporada pasada, en la que se proclamó campeón. El fútbol no queda nunca aparcado en sus redes sociales, especialmente ahora que espera ganar el Balón de Oro que le situaría por cuarta vez como el mejor jugador del mundo. Además de los éxitos deportivos y los relacionados con su imagen, ha tenido tiempo de lanzar una aplicación de la que destinará parte de los ingresos por las descargas a una ONG dedicada a los niños. La app, como no podía ser de otra manera, consiste en hacerse un selfie virtual junto a Cristiano Ronaldo.