Cuántos minutos tengo que hacer cola para ver las atracciones turísticas

Solo hay un Coliseo y por eso quien quiera verlo generalmente tiene que esperar dos horas bajo el sol romano; las mismas que para acceder a la Torre Eiffel. El Empire State, otra de las mayores fábricas de aglomeraciones turísticas, requiere de menos perseverancia: sólo es necesario pasar hora y media en fila para acabar en lo alto del edificio y deleitarse con las vistas aéreas de Nueva York. 

Desde que existe Internet, debería haber una alternativa a plantarse ante la Apple Store de Nueva York y, no obstante, ahí estaban 1.880 personas, batiendo un récord para comprar su iPhone 6 en 2014. La meca de la tecnología fabrica móviles a los que poco les queda para preparar un gazpacho a la vez que miden la temperatura corporal de su propietario y, sin embargo, el momento de formar fila frente a las puertas de la tienda continúa siendo tan arcaico como lo era hace 100 años.

Giovanni Cafaro es un milanés que se quedó en paro hace dos años y ahora trabaja haciendo cola para otras personas. Diez euros la hora

Aguantar el tipo cuando atizan 30 áridos grados bajo un sol de justicia es un padecimiento que ahora tiene precio. El mejor remedio contra las agotadoras esperas es que sea otro ser humano el que apechugue pacientemente por ti. Giovanni Cafaro es un milanés que se quedó en paro hace dos años y ahora trabaja haciendo cola en nombre de empresarios o jubilados en la dantesca administración pública de su ciudad. “Por diez euros la hora, me piden que espere en Hacienda, juzgados…”, cuenta. “O por un móvil o por el libro de fotografías de la modelo argentina Belén Rodríguez”. Lo que anhelamos nos retrata; cuánto lo esperamos nos humaniza.

Con la única intención de informar y prevenir a los turistas de la que se les viene encima cada vez que se animan a conocer los encantos de una ciudad nueva, Get your guide, una página web de turismo inglesa, ha calculado el tiempo de espera medio de cada uno de los monumentos más populares del mundo. Este es el resultado...

Los monumentos más visitados ordenados de mayor a menor tiempo de espera:

1. London Eye (Londres): 2 horas y media.

2. Casa de Ana Frank (Ámsterdam): 2 horas y media.

3. Palacio Ducal (Venecia): 2 horas y media.

4. Coliseo (Roma): 2 horas.

5. Catedral de Notre Dame (París): 2 horas.

6. Torre Eiffel (París): 2 horas.

7. Catacumbas (París): 2 horas.

8. Capilla Sixtina (Vaticano): 2 horas.

9. Museos del Vaticano: 2 horas.

10. Empire State (Nueva York): 1 hora y media.

11. La Sagrada Familia (Barcelona): 1 hora y media.

12. Casa Batlló (Barcelona): 1 hora y media.

13. Museo de Van Gogh (Ámsterdam): 1 hora y media.

14. Basílica de San Pedro (Londres): 1 hora y media.

15. Torre de Londres: 1 hora y media.

16. Museo del Louvre (París): 1 hora.

17. Catedral de San Pablo (Londres): 1 hora.

18. Museo Metropolitan (Nueva York): 1 hora.

19. Rijksmuseum (Amsterdam): 1 hora.

20. Museo Picasso (Barcelona): 1 hora.

21. Top of the Rock (Nueva York): 30 minutos.

Tenga en cuenta que...La ciudad más rápida de visitar. Nueva York. En solo tres horas se pueden disfrutar del Empire State, el Top of the Rock y la Estatua de la Libertad, que juntos suman un total de 12,7 millones de visitantes al año. Barcelona sigue a Nueva York muy de cerca en celeridad: bastan cuatro horas para conocer lugares esenciales de la capital catalana como La Sagrada Familia, el Museo Picasso o la Casa Batlló.

La ciudad más tediosa para hacer turismo. Roma -decimocuarto puesto en el rankig de ciudades más visitadas- es la urbe que requiere más paciencia: son necesarias siete horas y media para darse una vuelta por el Coliseo, la Capilla Sixtina, la Basílica de San Pedro y los Museos del Vaticano.

La atracción más visitada del mundo. Diez millones de turistas recorren los pasillos del Museo de Louvre (París) todos los años. Para disfrutar de La Gioconda, de Leonardo da Vinci, o del David, de Miguel Ángel, hay que esperar una hora.

La atracción más rápida. No hace falta disponer de mucha paciencia para admirar las mejores vistas de Nueva York. Después de solo 30 minutos de espera, los psicodélicos ascensores de Top of the Rock se encargan de llevar a lo más alto del observatorio a los 2,5 millones de visitantes que surcan el cielo de Nueva York todos los años.

La ciudad más cara para hacer turismo. El exceso de Nueva York no conoce límites. Reflejo de ello es el precio que tienen las entradas a los míticos monumentos de la ciudad. Subir al Empire State (30 euros), al Top of the Rock (27 euros) y a la Estatua de la Libertad (16 euros). En total, 73 euros. Si le añadimos un souvenir, el agujero en el presupuesto pude ser profundo.

La atracción más barata. La Basílica de San Pedro (Roma) es el monumento que menos saquea los bolsillos dentro de las ciudades más turísticas del mundo. Si uno cuenta con 8 euros puede acceder libremente a sus instalaciones. Pero no es la única atracción turística romana a un precio asequible. La capital italiana es la más económica turísticamente hablando: conocer el Coliseo (12 euros), los Museos del Vaticano -donde se encuentra la Capilla Sixtina- (16 euros) y la Basílica de San Pedro (8 euros) es posible por solo 36 euros.