“Me fastidia que la ciencia que más está interesada en África sea la antropología”
Por Anna Sans Llauradó
Momadou Diagne es miembro fundador de la Asociación Voz de África y Afrodescendientes de la Universidad de Granada (UGR), la primera asociación de estudiantes universitarios de origen africano de España, surgida con la intención de visibilizar a los africanos de una manera positiva y romper con los estereotipos negativos. También tiene la ambiciosa pero necesaria misión de motivar la colaboración y el intercambio entre universidades españolas y africanas, e incluso propone introducir más temario y autores africanos en algunas carreras de ámbito internacional para acabar con la ignorancia sobre el continente. Momadou es nacido en Senegal y en la UGR es estudiante de Ciencias Políticas.
© Anna Sans
Pregunta: ¿De dónde surgió la idea de crear esta asociación de estudiantes africanos?
Respuesta de Momadou Diagne: Salió de entre unos amigos de diferentes facultades de la universidad, estudiantes africanos principalmente de Senegal, Guinea Ecuatorial, Mozambique y afrodescendientes de Colombia. Siendo estudiantes africanos vimos que no había conocimiento sobre asociacionismo africano ni ningún caso previo de asociación de estudiantes africanos, y decidimos darle un poco de voz. Porque había interés pero no habían promotores, lo que había era un núcleo de profesores e intelectuales que hablaban en nombre de África y eso no nos parecía justo, nosotros somos los primeros interesados en África y es lo que más conocemos directamente, así que decidimos poner al menos nuestro granito de arena.
P: ¿Con un interés únicamente divulgativo?
R: Tenemos varios objetivos, uno de ellos es difundir la cultura. Otro es intentar romper con los estereotipos que hay sobre África, que no es solamente hambre, pobreza y guerras. Tiene muchas cosas interesantes, pero por desgracia la inmensa mayoría de la gente de aquí solo conoce de África los datos de las hambrunas. No podemos negarlo, pero también hay otras cosas que merece la pena conocer. La idea además es sentar un precedente, porque todo el mundo parece que siente lástima del continente y encima se cree que los africanos no hacemos nada para cambiar nuestra situación allí.
P: ¿Cuánto tiempo lleváis con la asociación y cuales son las principales actividades que habéis planteado?
R: Llevamos como dos años trabajando. No era fácil al principio, pero la motivación y las ganas estaban ahí. El primer año teníamos mucho programa, solo que como acabábamos de empezar no podíamos hacerlo todo. Hicimos algunas charlas y debates, y sobre todo intercambio, porque la idea de la asociación no es quedarse solo entre africanos sino darle a la gente la posibilidad de participar, sea de donde venga, y que estén interesados en conocer otra cara de África a través de charlas, ciclos de cine y debates. Y ahora empezamos un nuevo año con nuevas ideas.
P: ¿Qué acogida ha tenido la asociación en la universidad y entre los estudiantes?
R: Al principio fue difícil porque el asociacionismo estudiantil no está tan desarrollado aquí. No solo el africano, sino en su conjunto. Ahora es todo ya más familiar y nos ayudan mucho en la difusión de nuestros actos; y luego lo que es la gente, el público en sí, están muy interesados en conocer puntos de vista distintos sobre África. La acogida ha sido muy buena, pero mucha gente no quiere involucrarse hasta que no vea los frutos. Así que tenemos que seguir trabajando duro.
P: Pero ya habéis recogido algunos frutos de este tiempo de trabajo, ¿no?
R: Sí, porque el interés ha sido inmenso, incluso nos han contactado para dar charlas y talleres fuera de aquí, en el conjunto de Andalucía.
P: ¿La vuestra es entonces una asociación de carácter social o una asociación académica destinada a la investigación?
R: Cuando la fundamos no queríamos centrarla solo en lo académico o lo teórico, y perder así la esencia. La idea era intentar tener un equilibrio, sin perder además el contacto con la ciudadanía. Claro que tiene un carácter académico como soñamos, porque todavía es un sueño. No hay demasiados programas de intercambio académico, se dan sobre todo con Marruecos, pero con el resto de África no hay ninguno. Intentamos hablar con los dirigentes de la universidad para que en un futuro creen acuerdos con universidades africanas, porque hay muchos estudiantes de lengua española en esas universidades africanas, por ejemplo, pero no tienen la oportunidad de venir. Así que nosotros también tenemos el deber de cumplir esta misión, que es aún muy complicada.
P:¿Sois pioneros como asociación de estudiantes universitarios africanos en España?
R: Creo que no somos los primeros, no estoy seguro, había escuchado algo parecido en Sevilla. Intentamos, antes de crearlo, investigar un poco y creo que hay una asociación en Las Palmas, pero no nos hemos puesto en contacto porque antes de establecer proyectos conjuntos queríamos tener algo seguro, tener una base sólida. No queríamos vender un producto que no estuviera encaminado todavía, así que el primer paso es asentarnos. Cuando veamos que el proyecto es sólido -porque el proyecto no es solo para nosotros, es a largo plazo, porque en mi caso me voy a ir al terminar la carrera y debe ser algo para la generación futura- iremos a contactar con las otras asociaciones que pueda haber y mirar de crear una red.
© La asociación reunida en una muestra | Facebook de la Voz de África y Afrodescendientes UGR
P: ¿Qué te ofrece, personalmente, esta asociación?
R: A nivel personal me da más motivación para investigar sobre África. Por ejemplo, quiero hacer un máster, me interesaría especializarme en relaciones internacionales en África subsahariana, pero me temo que voy a tener que salir del país para hacerlo. Me dicen que no hay interés desde el Estado y como en ciencias políticas el interés va por delante... Luego lo que me fastidia bastante es que la ciencia que está interesada en África es la antropología. Creo que deberíamos romper con esta visión tan étnica y tener una relación un poco más igualitaria. Esta asociación me ha ofrecido una motivación extra para visibilizar estas cosas, más ganas de analizar la realidad africana para darla a conocer; ver, escribir y hablar por los que no tienen voz aquí. Estuve en Francia, donde hay muchas más asociaciones de este tipo, con mucha más experiencia, es otro nivel, y de una forma u otra nos gustaría aprender de lo mejor de allí, intentar progresar. Personalmente me he sentido muy satisfecho y realizado con este proyecto.
P:¿Cuál es la actividad que más has disfrutado y la que consideras que más éxito ha tenido en la asociación?
R: El año pasado vino una profesora de la universidad Cheikh-Anta-Diop de Dakar, Fatou Sarr, que es una de las feministas más importantes de África. Para nosotros fue todo un placer, un paso adelante para intentar demostrar que no todo es como lo pintan los medios. En África también hay intelectuales, hay feminismos, corrientes de pensamiento y filosofía, y allí tienen voz aunque aquí no se escuche. Pero aquí sigue la visión de que en África los africanos no hemos podido hacer algo útil para nuestros países. Eso es una gran mentira que se sigue repitiendo. La charla fue un gran éxito en ese sentido, permitió visibilizar estas pequeñas grandes cosas que son invisibles para la sociedad española. Para mi fue el acto más significativo en el que hemos participado.
Todo va en la línea de que tiene que haber colaboración entre universidades. Nuestra idea es colaborar al máximo entre continentes y no solamente en cooperación al desarrollo, sino como iguales. Hay personas allí que están muy bien formadas, pero no se les da la oportunidad; y a la vez hay gente que va allí a ayudar desde la ignorancia. Muchos son los que creen que Europa está ayudando, pero no es así. Muchos de los movimientos migratorios que hay tiene como principal causa la multinacionales que expolian los recursos naturales. Necesitamos oportunidades para contarlo, para aclarar las cosas, porque la inmensa mayoría de la gente lo desconoce.
P: ¿No crees que a estas alturas la mayoría de la gente ya sabe que los problemas de desarrollo en África son en gran parte consecuencia directa de una relación desigual con Occidente?
R: Hay un control mediático muy grande. Estoy seguro que más del 70% de los españoles no sabe de dónde viene el coltán, por ejemplo. Nuestro deber también es informar, poner en alerta algunas cosas que vemos que nos perjudican. No se trata de caer en el victimismo.
P: Creo que África ha superado ya ese papel de víctima.
R: Hemos cambiado el victimismo por la lucha, por una exigencia de la dignidad. Al fin y al cabo, no dejamos de ser también seres humanos, no hablo solo de los africanos, sino también de otros pueblos del sur, como los sudamericanos, que están teniendo muchos progresos. Sobre todo en el hecho de poder viajar. Si eres africano, cuando sales de tu país aunque lo hagas legalmente, aunque vengas a estudiar como yo, te persiguen, siempre eres culpable.
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