Desforestación
Viajando por rutas secundarias de nuestras carreteras, estamos observando talas masivas de árboles, en particular chopos en los cauces de los ríos, lo cual, además de una pérdida paisajística, es un atropello ecológico. Esto está ocurriendo tanto en zonas remotas, donde nadie lo ve ni se queja, como en las riberas de algunas ciudades. Curiosamente estos árboles talados, que deben permanecer en el lugar para su biodegradación, tardan pocas horas en desaparecer. El argumento es la “limpieza de los cauces”, pero uno que es malpensado, piensa si no estará detrás el clan de la biomasa, y su perentoria necesidad de materia prima.
Estudios independientes han confirmado la pérdida sobre el terreno de cientos de miles de hectáreas de arbolado solo compensada parcialmente.— Antonio de la Hoz.
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