_
_
_
_
OPINION
Columna
Artículos estrictamente de opinión que responden al estilo propio del autor. Estos textos de opinión han de basarse en datos verificados y ser respetuosos con las personas aunque se critiquen sus actos. Todas las columnas de opinión de personas ajenas a la Redacción de EL PAÍS llevarán, tras la última línea, un pie de autor —por conocido que éste sea— donde se indique el cargo, título, militancia política (en su caso) u ocupación principal, o la que esté o estuvo relacionada con el tema abordado

Yo, Cristina

Bueno, se levanta la sesión. A ver si pasa ya la semana y vamos el ‘finde’ a casa

Luz Sánchez-Mellado

Qué injusticia, qué contrariedad, qué lata. Qué hago yo aquí, encerrada en el quinto pino de Palma, con lo bien que podríamos estar todos esquiando en Gstaad aprovechando la semana blanca de los niños. A quien se le diga, no se lo cree. Tener que estar cinco horas sentada sin poder levantarte ni al baño y escuchando a gente decir cosas de las que no tienes ni idea. Claro que se me cierran los ojos, claro que se me abre la boca, claro que estoy doblada. Pero no voy a bajar la cabeza, ni a bostezar, ni a cruzar las piernas. La espalda recta, la mirada al frente, la cabeza alta. Me lo enseñó mamá, igual que a no clavar los codos en la mesa y a distinguir la pala del pescado entre la cubertería de gala. Por cierto, ¿qué estarán haciendo los niños? Les hemos dicho que estamos unos días haciendo un recado en España, pero a los mayores ya no se la cuelas. La pequeña es aún muy bebé. Tan dulce, tan mimosa, tan apegada a su padre.

Iñaki. Ay, Iñaki. Yo no digo que no me haya hecho alguna, pero es mi marido y el padre de mis hijos. Mírale: aún es el más alto y el más guapo y el más rubio y el de los ojos más azules, pese a haber tenido años mejores. Como yo, no te fastidia. Dicen que estoy hundida, demacrada, que me han caído encima los 50 años de repente. ¿Cómo quieren que esté, si no pego ojo, si no vivo, si me ha abandonado a mi suerte todo el mundo, empezando por mi familia? Podría esmerarme, hacerme un retoque, sonreír a las cámaras. Pero no voy a darle ese gusto a nadie. Hay que ver el frío que hace aquí en febrero, con lo bien que se está al sol en la terraza del Club Náutico. Ahí tienes a Pepote, por cierto, hablando de más, con lo fenomenal que le tratamos, que hasta fuimos a su boda. La jueza es mona, la verdad. Samantha, creo que se llama la chica. Querrá pasar a la historia por no haber librado de este lío a una infanta de España. Bueno, se levanta la sesión. A ver si pasa ya la semana y vamos el finde a casa.

Haz que tu opinión importe, no te pierdas nada.
SIGUE LEYENDO

Tu suscripción se está usando en otro dispositivo

¿Quieres añadir otro usuario a tu suscripción?

Si continúas leyendo en este dispositivo, no se podrá leer en el otro.

¿Por qué estás viendo esto?

Flecha

Tu suscripción se está usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PAÍS desde un dispositivo a la vez.

Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripción a la modalidad Premium, así podrás añadir otro usuario. Cada uno accederá con su propia cuenta de email, lo que os permitirá personalizar vuestra experiencia en EL PAÍS.

En el caso de no saber quién está usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contraseña aquí.

Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrará en tu dispositivo y en el de la otra persona que está usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aquí los términos y condiciones de la suscripción digital.

Sobre la firma

Luz Sánchez-Mellado
Luz Sánchez-Mellado, reportera, entrevistadora y columnista, es licenciada en Periodismo por la Universidad Complutense y publica en EL PAÍS desde estudiante. Autora de ‘Ciudadano Cortés’ y ‘Estereotipas’ (Plaza y Janés), centra su interés en la trastienda de las tendencias sociales, culturales y políticas y el acercamiento a sus protagonistas.

Archivado En

Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
_
_