Así dilapida su dinero el deportista que más gana

Sería divertido si se tratase de un personaje de ficción, una especie de caricatura de nuevo rico fanfarrón que presume de jet privado y coches deportivos. Su ridícula ostentación es tan exagerada que parece sacada de una comedia de Ben Stiller. Sin embargo, Floyd Mayweather (Michigan, 38 años) es un personaje real que no solo es multimillonario sino que hace todo lo posible para que la humanidad lo sepa. Además de ser el deportista mejor pagado del mundo en 2015, Mayweather es el famoso que más ha ingresado este año, según Forbes: 279 millones de euros. Si juntamos las nóminas de Ronaldo (74,7, tercero más rico) y Messi (69,3, cuarto puesto), se quedan, en comparación, en unos flácidos 188 millones de euros. El actor que más ha ganado este año está también a mucha distancia del boxeador: Robert Downey Jr, con 75,1, en el octavo puesto.

Mientras otros airean en Instagram sus cenas y vacaciones, el imbatido boxeador (49 victorias), supuestamente retirado tras la lucrativa última pelea con Manny Pacquiao (84,2 millones de euros sumando contrato, patrocinadores y derechos de televisión), exhibe en sus redes sociales un estilo de vida presidido por el derroche, el mal gusto y un dudoso respeto por las mujeres. Así se dilapida la mayor fortuna del deporte.

FIESTAS: MUJERES Y BILLETES

A cualquiera con un mínimo de sensibilidad, la escena le hará daño a la vista: Floyd, fajo de dólares en mano, los va arrojando por los aires mientras un grupo de señoritas, todas de espaldas, ejecutan una coreografía consistente en hacer temblar sus traseros, por otra parte prominentes. Este fragmento del sarao que Mayweather montó en su casa a primeros de noviembre puede verse en el vídeo (ver abajo) que él mismo subió a Instagram con el texto: “Solo una fiesta casera normal a las 5.16 AM para el Sr. Mi Vida Es La Leche”. Ojo, que el vídeo tiene más de dos millones de "me gusta". Por cierto, ¿formaba parte su actual novia del cuerpo de baile? Nooo. Doralle Medina —una doble de Beyoncé que no es cantante sino masajista— estaba tostándose al sol en Miami Beach, ajena (o no) a lo que sucedía en la casa de su derrochador novio. No es la primera fiesta de esas características que organiza: el año pasado Floyd ya lió una parecida, también aireada en Internet.

CASOPLÓN CON DUCHA PARA 12 PERSONAS: 8,3 MILLONES €

Es la cantidad (8,3 milllones de euros) en la que expertos inmobiliarios preguntados por el Wall Street Journal valoraron su mansión en Las Vegas. Dicen que la pagó en efectivo. Características: 2.043 metros cuadrados, cinco dormitorios, siete baños, una sala de cine de dos plantas y (agárrense) una ducha para 12 personas. Y lo más genial: la casa tiene su propia cuenta de Instagram. Sí, se llama Big Boy Mansion y es un catálogo ilustrado de estancias, platos de comida, colecciones de relojes y detalles de sus coches. Y billetes por todas partes, claro. Probablemente un psicólogo sacaría algunas conclusiones de alguien que trata su casa como si fuera una persona.

COCHES: 28 MILLONES €

Sus gustos caros también abarcan el sector automovilístico. Según contó su hombre de confianza en asuntos del motor Obi Okeke al portal de cotilleos TMZ, el boxeador le envía a subastas para que le compre “algo único”, y Okeke no le decepciona. El pasado octubre le consiguió un Pagani Huayra por 2,9 millones de euros, y un Aston Martin One-77 por 3 millones. En su colección, que según Okeke actualmente está valorada en 15 millones, pero que aspira a llegar pronto a los 28, también figura un Bugatti de 3,2 millones. Con estas recientes adquisiciones quizá ha tratado de reemplazar el Bentley y los dos Rolls Royces de su propiedad que se incendiaron en el camión que los transportaba solo unos días antes, según el mismo portal de noticias.

PROTECTOR DENTAL: 23.300 € (PARA UN SOLO COMBATE)

Este accesorio común entre los boxeadores es para Floyd otra excusa para el despilfarro. Antes de su célebre combate contra Pacquiao encargó 20 unidades de diferentes diseños y acabados, entre ellas una realizada con trozos de billetes de 100 dólares (¡increíble su obsesión!), otras bañadas en oro y alguna con incrustaciones de diamante. Según reveló New York Daily News, se las fabrica su dentista de confianza, el Dr. Lee Gause, de Nueva York, que por este pack le pasó una factura de 23.300 euros. Por supuesto, era el dentista quien se desplazaba a Las Vegas para realizar pruebas y ajustes, y no a la inversa. El afortunado odontólogo lleva varios años trabajando para Mayweather, y cuenta que, por lo general, el púgil le pide protectores a juego con sus coches.

RELOJES: MÁS DE 6 MILLONES €

Accesorios y joyas también fascinan al deportista, cuanto más caros y chabacanos mejor. En el Instagram de su mansión aporta pruebas de que posee siete relojes de oro rosa, uno para cada día de la semana, un Casio G-Shock también de oro rosa con incrustaciones de diamante, un Rolex de similares características e incontables cadenas de oro y pedruscos cuyo tamaño podría ser perjudicial para la espalda. Imposible saber cuántos relojes posee, pero en un solo vídeo en Instagram contamos 38. En 2013, él mismo reveló en un post (del que se hizo eco el Daily Mail) que su colección de relojes estaba valorada en 6 millones de euros; es de suponer que desde entonces ha aumentado. El chico no se ha enterado que se puede ver la hora en el móvil.

CLUBES DE 'STRIPTEASE': 93.000 € POR NOCHE

Cuando entra por la puerta de un club de despelote, las bailarinas hacen su agosto. El pasado junio apareció en uno de estos garitos, en Houston, y duchó a las chicas con billetes por un total de 32.600 euros. Hay imágenes de su paso por otro club, en Miami, donde dicen que esparció entre las bailarinas 93.000 euros. Este tipo de espectáculos parece que son muy apreciados por el generoso Mr. Dinero (como le gusta llamarse), quien, dicho sea de paso, tiene un grueso historial de violencia contra las mujeres, delito por el que ha sido condenado en 2002, 2004 y 2011, cuando fue sentenciado a 90 días en prisión por un “delito menor de agresión” contra Josie Harris, su exnovia y madre de tres de sus cuatro hijos.

DOS AVIONES PRIVADOS: 52 MILLONES €

Según el Daily Mail, Mayweather no tiene uno, sino dos jets privados, cada uno por valor de 52 millones de euros. A bordo de su Gulfstream V viajan él y su familia; el Gulfstream IV es para que lo use “El Equipo del Dinero”, su corte de acólitos entre los que figuran, según el mismo diario, “varios guardaespaldas, dos masajistas a jornada completa, un asistente que lleva su jabón desinfectante para las manos (tiene fobia a los gérmenes) y un peluquero personal”. Siempre bien acompañado. Además, "El equipo del dinero", 'The Money Team', en inglés, hace referencia a la marca de ropa que lleva continuamente el exboxeador con las siglas TMT.

ROPA Y CALZADO: 93.000 € EN PLAYERAS Y 6.095 EN CALZONCILLOS

Millonario de la cabeza a los pies, enfunda estos en primeras marcas y las mejores calidades. Cuando tiene un día de bajón se traslada a la tienda de Louboutin más cercana y arrampla con todo: posee más de 80 pares de zapatillas de esta firma, por los que pagado unos 93.000 euros. En mayo posteó en Instagram que, recién levantado a la una de la tarde, había salido a comprar calzado y se había hecho con un buen cargamento de Gucci, Prada y Dita Hockey. Para los calzoncillos, en cambio, supimos gracias a un gran reportaje en ESPN que recurre a los más asequibles almacenes Macy’s: posee toneladas de boxers de 16,7 euros, pues los usa una sola vez. Una sencilla multiplicación por 365 arroja un gasto anual en ropa interior de 6.095 euros.

VACACIONES CON JUSTIN BIEBER: 3.818 € LA NOCHE

A principios de octubre, él y su íntimo amigo Justin Bieber se escaparon unos días de vacaciones a Bora Bora (Polinesia Francesa). Según informó Rolling Stone, se alojaron en el Hotel St. Regis, el mejor del archipiélago, en una villa sobre el agua de categoría “Royal”, de 265 metros cuadrados, que cuesta, dependiendo de los servicios contratados, entre 888 y 3.818 euros la noche (y es de suponer que estos dos no se cortaron a la hora de los gastos). Terrazas privadas y una piscina con forma de lago de efecto infinito fueron el marco incomparable de este idílico viaje en el que los dos colegas terminaron cantando canciones de los Beatles en un karaoke. Floyd publicó la foto de abajo, con Justin (de pie), el boxeador (derecha) y un tipo de bigote sin identificar, con el siguiente mensaje: "Quieren saber qué tienen en común... ganar dinero". ¡Todo un ejemplo!