Este enigmático músico es número uno en el mundo, salvo en España
The Weeknd, que empezó vendiendo hierba en la calle, reina en las listas de ventas. Sus letras conflictivas es uno de sus fuertes
Se adelanta unos pasos hasta el borde del escenario y luego retrocede, acercándose a ella como si no acabara de creérselo. Pero sí: es Alicia Keys quien está acompañándole al piano, entrelazando con él los sensuales versos (“Eres perfecta, te lo mereces, la forma en que te lo curras, te lo has ganado”) de Earned it. Y la cosa podría haber sido más intensa si no fuera porque The Weeknd, a diferencia de su admirado Michael Jackson, se mueve como si tuviera un pinzamiento lumbar. Cuando terminan de cantar, la platea estalla en aplausos y la cámara se detiene unos segundos en… eh, ¿no es esa Rihanna, aplaudiendo un tanto forzada, como los nominados al Oscar cuando el sobre designa otro triunfador?
En España lidera la lista el 'reggaeton'. De momento no cala este hombre que ha colaborado con Kanye West, Lana del Rey o Ed Sheeran
Las imágenes pertenecen a la gala de premios de la cadena estadounidense BET (Black Entertainment Television), celebrada el pasado 28 de julio en Los Ángeles. En realidad, es solo uno más de los muchos momentos increíbles en los últimos meses en la vida de Abel Tesfaye, 25 años, alias The Weeknd. Además de Alicia Keys, otros famosos como Ariana Grande, Lana del Rey, Ed Sheeran, Drake, Sia, M.I.A., Wiz Khalifa y Kanye West han colaborado con él. En el momento de escribir estas líneas, este enigmático artista canadiense tiene dos canciones entre las cuatro más vendidas en Estados Unidos, Can't feel my face (en el número uno) y The hills (en el cuatro). En otros muchos países se lo monta igual de bien: Reino Unido, Dinamarca, Holanda, Turquía, Australia, Suecia...
En España la cosa cambia: dominada por el pelotón latino, la lista oficial de ventas le presenta en un discreto puesto 28. Aunque ¿te suena el tema Earned it, de la banda sonora de Cincuenta sombras de Grey? Quizá hayas visto su cabaretero vídeo plagado de traseros femeninos. Ahora caes: sí, ese es The Weeknd. Coincidiendo con la publicación de su nuevo álbum, Beauty behind the scenes, quizá sea el momento de escarbar un poco en su pasado para conocer mejor a este cantante de pelo imposible con madera de ídolo del pop (casi) mundial.
Envuelto en el misterio
Lo poco que se sabe de Abel Tesfaye (Scarborough, Ontario, 1990) ha salido a la luz en fechas recientes. Hasta hace poco no concedía entrevistas. Irrumpió con sigilo: sus primeros lanzamientos (sin contar las canciones que subió a YouTube en 2010) no fueron propiamente discos, sino mixtapes (nota: lo mismo que un disco pero sin ambición comercial; suelen ser descargas gratuitas para darse a conocer o promocionar una gira) de R&B electrónico casero. Las fotos que circulaban por ahí podían haber sido de cualquiera: eran oscuras, con muchas sombras. Para colmo, estaba lo del apodo: ¿cómo un tipo puede hacerse llamar “El Fin de Semana”? En una entrevista en la revista Vice, el productor Jeremy Rose afirmó que al principio The Weeknd era un dúo, Abel y él. Cuando Jeremy se fue, Abel quitó la última “e”. En cualquier caso, parece que estamos ante un nuevo estilo de estrellas del pop, con tendencia a marcar distancias y utilizar seudónimos que parecen piezas sueltas de Scrabble (como Charli XCX, Tove Lo, FKA Twigs, OMI o Avicii).
Le pirra Michael Jackson
Una escucha a ciegas de los primeros versos de Can't feel my face podría hacer pasar este éxito de The Weeknd por una canción póstuma de Michael Jackson: el timbre agudo, el ritmo en la voz… Abel no disimula su admiración por el desaparecido Rey del Pop: “Nunca podré ser Michael Jackson, ni hacer lo que él hizo, pero es una buena inspiración. Cuando murió, sentí como si hubiera muerto alguien de mi familia”, dijo este verano en Pitchfork. En la misma entrevista reconoce que sus tres grandes referentes han sido Jackson, Prince y (en fin) R. Kelly. Y es que debajo de ese envoltorio sombrío hay melodías bastante accesibles; de hecho, el coautor de Can't feel my face no es otro que el sueco Max Martin, artífice de éxitos de Britney Spears y Katy Perry. Ese ángulo siniestro-pero-no-tanto de The Weeknd le ha permitido ganar millones de adeptos.
Adolescente conflictivo
Debajo de ese baobab que tiene por pelo hasta parece que tiene cara de bueno… Pero algún que otro plato sí que ha roto. Cuando sus padres, etíopes que habían emigrado a Canadá, se separaron, él se quedó viviendo con su madre, solo hasta que se juntó con malas compañías. Según el artículo que le dedicó este julio el New York Times, un buen día, para pasmo de su madre, apareció por casa con un colega para llevarse el colchón. Se fue a vivir con dos amigos, alimentándose básicamente de lo que choriceaban en el súper. Tuvo trabajos respetables (dependiente en American Apparel) y otros no tanto (trapicheos con hierba). Cuando no tenía dónde dormir, buscaba la cama caliente de alguna de las chicas que lo pretendían diciéndole que la quería. “Hubo como tres chicas a la vez convencidas de que yo era su novio”, declaró. Quien tuvo, retuvo: en enero fue detenido en Las Vegas por agredir a un policía.
Le acusan de machista
“Cuando subí al escenario ella juró que yo medía 1,80, pero cuando se lo metió en la boca no pareció alcanzar mi…”, insinúa en Kiss land, el tema que da título a su anterior álbum (2013). “Puedes reunirte conmigo en la habitación donde los besos no son gratis, tienes que pagar con tu cuerpo”, prosigue en la misma canción. Estos y otros textos le han valido que lo tilden de machista. “Quienes me critican no entienden que esto es arte”, alegó en Pitchfork. “La música es como el cine. Cuando Tarantino hace una película le echan mierda todo el rato, pero es su arte. Lo importante es que a mis oyentes les gusta”. Eso es cierto: una generación de jóvenes (y no tanto) sin remilgos, un poco hartos de baladitas ñoñas, han encontrado en The Weeknd lo que buscan. En cualquier caso, el contraste entre las letras calentorras y la delicadeza de su música es brutal.
Y él con esos pelos
Ah, el asunto del pelo. Es la única estridencia en la imagen de este chico, por lo demás normalita. Pero lo cierto es que hay quien se ha ensañado con él por su curioso estilismo capilar… y no sabemos si con razón, pero sí con gracia. El verano pasado, un portal gastronómico llamado Foodbeast publicó un post titulado 13 comidas que se parecen al pelo de The Weeknd, citando entre ellas la col fresca, un manojo de apio, una piña y hasta nuestros entrañables churros. En la fiesta posterior a la entrega de los premios Grammy del pasado marzo, parece que Taylor Swift se pasó la noche achuchando el pelo de Abel como si fuera un animal de compañía. Parece que la novia de Abel, la modelo Bella Hadid, de 18 años, también está prendada de esa llamativa cabellera con ilustres precedentes en el mundo del arte; si no, busca en Google “Basquiat”.
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