Salvemos la casa de ‘Los Goonies’… de sus propios fans

Imagine que tiene que ver a diario como cientos de personas se acercan a la valla de su preciosa casa de madera pintada de blanco, se levantan la camisa y empiezan a bambolear la grasa de su abdomen mientras emiten sonidos ininteligibles. Eso es exactamente lo que le pasó al propietario de uno de los lugares icónicos en los que se rodó Los Goonies, el clásico del cine preadolescente de los 80, y lo que ha provocado el cierre a los visitantes de ese escenario clave de la película de Richard Donner. El dueño ya no pudo aguantar las “más de 1.500 visitas diarias” de fans del filme que, además de hacer el “supermeneo” de Gordi, dejaban la propiedad llena de latas de cerveza y que bloqueaban la salida aparcando coches en cualquier lugar. La semana pasada, dijo basta.

Sean Astin, uno de los actores que protagonizó Los Goonies, ha hecho un llamamiento a través de Facebook a todos los fans de la película para que respeten la intimidad de los habitantes de la casa. “La película trata sobre unos niños que aman tanto sus hogares que luchan por protegerlos”, explica. “Amo tanto ese lugar que llevé a mis amigos a un viaje casi mortal para encontrar un tesoro con el que salvarlas. Para mí y para muchos otros ese lugar es un hito de nuestra infancia”.

“En nombre de todos los Goonies”, continúa Astin, “os digo que esa casa está otra vez bajo asedio. Esta vez no se trata de unos constructores, sino de algunos fans de la película. La mayoría son amables, pero algunos son ofensivos y están amenazando la paz de este santuario”. “El actual propietario de la casa de Los Goonies merece respeto y que se le trate con educación. De alguna manera, esa es la casa de mi infancia, así que le digo a todo el mundo que dejen de molestar”. En su lugar, Astin explica que hay distintios lugares que los fans pueden visitar, como el Goonies Musem, y que en la oficina de Turismo de Astoria, la localidad del estado de Oregon en la que está situada la casa, se informa sobre distintos puntos desde los que disfrutar de una buena vista de la casa… desde un poco más lejos.