Una falsa felicidad
El otro día estuve en una conferencia en la universidad en la que el ponente declaró: “Un estudio afirma que nuestra élite intelectual es tan solo el 19% de la población; vosotros sois la élite del país”. Puede que sea un comentario que debería alegrarme. Sin embargo, me causó rabia.
Afirmaciones como esta tratan de inflar el ego de los estudiantes universitarios a costa de los que han preferido otra vía profesional o simplemente no han podido pagarse la matrícula. Tenemos la estúpida necesidad de que nos den una palmada en la espalda y nos digan lo maravillosos que somos. Así, tantos halagos van hinchando nuestro globo, hasta que al mínimo roce explota. Sin embargo, cuando esto sucede —cuando algo va mal— tendemos a compadecernos de nosotros mismos y no asumir nuestra culpa.
Bajemos de la nube; afortunadamente, siempre habrá alguien mejor que nosotros. Apreciémonos más; nuestra felicidad no puede depender de la opinión ajena. Crezcamos; las rabietas y la autocompasión no llevan a nada. Abramos los ojos —o mejor la mente— y démonos cuenta de que es mejor ser cola de león que cabeza de ratón.
Por cierto, busqué el estudio mencionado al principio, pero no logré encontrarlo.— Soledad Robles Romero.
Tu suscripción se está usando en otro dispositivo
¿Quieres añadir otro usuario a tu suscripción?
Si continúas leyendo en este dispositivo, no se podrá leer en el otro.
FlechaTu suscripción se está usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PAÍS desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripción a la modalidad Premium, así podrás añadir otro usuario. Cada uno accederá con su propia cuenta de email, lo que os permitirá personalizar vuestra experiencia en EL PAÍS.
¿Tienes una suscripción de empresa? Accede aquí para contratar más cuentas.
En el caso de no saber quién está usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contraseña aquí.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrará en tu dispositivo y en el de la otra persona que está usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aquí los términos y condiciones de la suscripción digital.