Como el vuelo de Ícaro
Esta semana conmemoraremos el primer aniversario de la desaparición de un icono: Caixa Sabadell. Como el Ícaro de la mitología griega, los responsables de Caixa Sabadell decidieron volar demasiado alto y, por codicia y una gestión temeraria, se llegó al final de una entidad histórica que consiguió convertirse en la más antigua de Cataluña. La Caja de Sabadell nació en 1859, superó dos dictaduras, una Guerra Civil y una difícil posguerra. Sin embargo, no sobrevivió la grave recesión del año 2008, la euforia del bum inmobiliario y unos directivos que decidieron salir de su ámbito territorial y entrar en un juego de especulación desenfrenada.
Con el derrumbamiento de esta institución financiera, se borró la esencia de un ente que priorizaba la obra social, facilitaba el crédito a la pequeña y mediana empresa local, ayudaba a los emprendedores y daba trabajo estable a muchos de nuestros conciudadanos. Doce meses de una pérdida evitable y de una impunidad lamentable.— Eulàlia Bordas Cuscó.
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