‘Los hombres de Paco’ vencen a ‘Crematorio’
En el último enfrentamiento de cuartos de final, una serie sobre los entresijos de la corrupción inmobiliaria se enfrenta a otra sobre un grupo de policías con toques cómicos
ACTUALIZACIÓN: Los hombres de Paco gana a Crematorio al lograr un 52,12% de los votos.
Con este enfrentamiento terminan los cuartos de final. Dos series una vez más muy distintas. La primera, Crematorio (de Canal+), cuenta los entresijos de la corrupción inmobiliaria. La serie, basada en una novela de Rafael Chirbes, la protagonizó magistralmente José Sancho. Del otro lado, una serie sobre un grupo de policías: Los hombres de Paco (de Antena 3), que protagonizaron Paco Tous, Adriana Ozores, Hugo Silva, Michelle Jener o Mario Casas, entre otros. Finalmente, Los hombres de Paco ha ganado con el 52,12%
Crematorio
Por Guillermo Altares
Cuando vimos The Wire, muchos pensamos que ojalá alguien hiciese algo parecido sobre España, una disección salvaje y sin concesiones de la España actual con una trama policíaca. Crematorio es lo más parecido que hemos tenido a eso. Desde que comienza a sonar la canción de Loquillo que acompaña a los títulos de crédito –Cruzando el paraíso: “nada permanece, todo se desvanece”–, el espectador percibe que se encuentra ante algo diferente a lo que ha ofrecido hasta ahora la ficción televisiva en España.
Adaptación muy libre de la novela de Rafael Chirbes, con la que recibió el premio de la Crítica, la serie de seis episodios transcurre en la ciudad imaginaria de Misent, donde el narrador valenciano sitúa una parte de sus ficciones y que encarna toda la podredumbre que se ha multiplicado en la costa española al calor del boom inmobiliario y de la corrupción. Allí, un constructor Rubén Bertomeu, campa a sus anchas, moviéndose como pez en el agua en la ciénaga. José Sancho, fallecido el pasado marzo, le aporta toda la dimensión que necesita el personaje: una mezcla de chulería, despotismo, encanto y oportunismo.
En solo una escena, cuando Bertomeu le ofrece la alcaldía de Misent en un yate a un segundón porque el actual regidor está empezando a poner problemas, Crematorio resume una parte esencial de la historia reciente de España, ese lodazal en la que se mezclan la mafia, la impunidad de la corrupción, la construcción y la parte más siniestra de la política. La serie transcurre casi siempre en una inmensa gama de grises, no juzga a los personajes, sino que, como ocurre en la literatura de Chirbes, trata de que se expliquen a sí mismos. También consigue así que todo lo que vemos en la pantalla no nos parezca ajeno: es un España real, cercana, que conocemos pero que hemos tratado de ignorar. Dirigida por Jorge Sánchez-Cabezudo y producida por Fernando Bovaira para Canal +, la serie puede resultar a veces imperfecta –la trama sentimental es más débil que la parte política y policíaca–; pero tiene la contundencia, la verosimilitud y la inteligencia de cualquier producto estadounidense similar.
Los hombres de Paco
Por Elisabet Sans
Las series policíacas nos tienen acostumbrados a personajes serios y profesionales, con dotes privilegiadas para resolver crímenes y poco dados a la comedia. Pero la comisaría de San Antonio era todo lo contrario. La serie Los hombres de Paco reflejaba un equipo de policías que solían cometer errores de bulto, en el que se entremezclaban agentes demasiado tímidos y miedosos con otros demasiado echados para adelante que solían meterse en más de un lío con el comisario Don Lorenzo (Juan Diego), que acostumbraba a responder con más de una referencia a su entrepierna. Al fin y al cabo, eran un grupo de perdedores, esos personajes tan característicos de la ficción española.
Emitida en Antena 3 desde 2005, las ocho temporadas y 117 capítulos de la serie de Globomedia dio para tramas de lo más delirantes. Iván Escobar, guionista y coproductor de la serie, las resumió a la perfección en su escrito de defensa de esta ficción española –ganadora en la primera ronda contra Médico de familia- que se ha emitido en cerca de 30 países. “Era una serie centrada en una comisaría llena de policías ineptos con tramas tan delirantes como descongelar a Walt Disney, acudir a Irak a capturar a Bin Laden, cocinar el brazo incorrupto de Santa Teresa o creer que al comisario le habían sodomizado, cuando en realidad tenía almorranas”.
Tramas policíacas aparte, la serie encandiló a todas las adolescentes del país con el amor platónico de Sarita (Michelle Jenner) por Lucas (Hugo Silva). Mientras ella suspiraba por uno de los mejores amigos de su padre (Paco Tous) y exmarido de su tía (Marian Aguilera), capítulo tras capítulo Hugo Silva se iba convirtiendo en el nuevo sex-symbol de la televisión. Cuando la historia de la joven enamorada se hizo realidad, fueron muchas las adolescentes que se emocionaron ante el televisor con esa boda furtiva de la pareja. Y cuando parecía que al fin había tenido un final feliz, la historia de amor tuvo más recorrido cuando se convirtió en un trío amoroso de guapos con la llegada de Mario Casas (el joven policía Aitor) a la serie. Un drama romántico que se resolvería en una boda homosexual aún más dramática y sanguinaria y que se llevaba por delante a varios de los protagonistas de la serie. Probablemente un final de temporada que para muchos hubiese sido la manera perfecta de terminar la serie.
Lo cierto es que nadie querría tener a esos policías en la comisaría de su barrio, pero sí a un grupo de amigos capaces de poner en peligro su vida para protegerte, con los que reunirte cada mañana para desayunar sobaos y compartir los secretos del corazón.
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