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Editorial
Es responsabilidad del director, y expresa la opinión del diario sobre asuntos de actualidad nacional o internacional

Mar de hierba

Detrás de las plantaciones malagueñas de marihuana hay una organización muy profesional, incluso maniática

SOLEDAD CALÉS

Como suponía Stefan Zweig, algunos momentos estelares de la humanidad iluminan de golpe varios enigmas simultáneos y aparentemente inconexos. La policía ha desmantelado en Málaga 15 plantaciones hidropónicas de marihuana, en las que florecían más de 13.000 plantas, instaladas más como un laboratorio de la NASA que como un cultivo agropecuario del montón. Los complejos marihuanísticos estaban bajo techo, gozaban de luz artificial y de sofisticados sistemas de ventilación, porque la hierba requiere cuidados si se quiere que sea de calidad. Los consumidores holandeses, expertos catadores, no aceptan cualquier matojo. La seriedad del proyecto está fuera de toda duda; no había lugar para los tiestos ni para los huertecillos en zulos. La producción de marihuana malagueña era un auténtico proyecto de innovación e I+D, dirigido por especialistas botánicos. Dicen que la infraestructura se trajo de Holanda, en grandes camiones, para cuidar todos los detalles. Detrás de las plantaciones hay una organización muy profesional, maniática y muy consciente de que en los Países Bajos hay una demanda constante que necesita una oferta profesionalizada.

De forma que cuando la policía andaluza detuvo a 21 personas encargadas de esta agricultura de última generación tecnológica respondió inmediatamente a una primera pregunta hasta entonces sin respuesta. La marihuana que se consume en los coffeshops holandeses procede de ese centro productor de gran rendimiento en Málaga, un centro de suministro de gran eficiencia. Andalucía provee de sol y de risas. El Mediterráneo era un mar de hierba y en Ámsterdam sin enterarse.

Segundo misterio revelado. Ya sabemos por qué ha mejorado tanto la balanza comercial y, en consecuencia, la balanza por cuenta corriente. Creíamos —unos más que otros— que el déficit comercial bajaba por las acertadas medidas del Gobierno o por la tensión exportadora de los emprendedores, pero no. Era por la exportación de marihuana. Cerradas las plantaciones, veremos cómo evoluciona en 2013 el sector exterior. Con menos alegría, seguro.

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