Sobresueldos opacos

Parece evidente que el juez Ruz no dispone de toda la información necesaria para poder determinar si las cantidades entregadas a los dirigentes del PP según los apuntes de su extesorero fueron adecuadamente declaradas. Y si esa información no basta se debe a que la Agencia Tributaria no le ha facilitado los datos de las retenciones que el PP ha practicado a sus empleados y dirigentes a cuenta del IRPF.

Conociendo tales datos, bastaría cotejarlos con las autoliquidaciones presentadas para determinar si se ha retenido y tributado adecuadamente. Y parece vislumbrarse que tal información o no se ha aportado, que ya es grave, o, lo que es peor, la Agencia Tributaria no dispone de ella.

A las imprecisiones del Tribunal de Cuentas parece que podría añadirse una grave relajación de la Administración al exigir el cumplimiento de las obligaciones fiscales a los partidos políticos. Relajación que han compartido varios Gobiernos con respecto al control fiscal de muchos, si no a todos ellos. Es competencia de la Agencia Tributaria despejar tales dudas o sumirse en ellas.— Isidoro Salvador Villanueva.