Poder decidir

Tras leer el reportaje La cara oculta de las mujeres saudíes, aumenta mi respeto y admiración por esos cientos de mujeres, bien formadas, con ganas de trabajar, que sueñan y quieren emanciparse. Dejar de ser invisibles y controladas por un varón el resto de sus vidas. Comenta la autora del reportaje que la mayoría de jóvenes ansían un cambio gradual. También que Arabia Saudí está dejando de ser una sociedad tan cerrada. Discrepo en lo segundo. Resulta desolador que el año pasado se produjeran más de 5.000 bodas de niñas menores de 14 años. ¡Deseo tanto que estas mujeres puedan elegir y decidir por sí mismas! Pero qué difícil lo tienen. Si cometen un acto que deshonre a sus familias, estas pueden matarlas para limpiar su apellido. Si rechazan una propuesta de matrimonio o piden el divorcio, se las puede mutilar. Arrojándoles ácido para desfigurarlas y que sean rechazadas por los demás hombres. Si se las acusa de adúlteras, se las puede lapidar. Por optimista que yo pretenda ser, millones de mujeres seguirán siendo “libres” solamente dentro de sus jaulas.