La hoguera para otros

El señor Vargas Llosa califica a doña Esperanza Aguirre como una “Juana de Arco liberal”. Doña Esperanza ha abandonado el timón y en la hoguera ha quedado la Comunidad de Madrid, no ella. ¿Existe similitud con Juana de Arco? Doña Esperanza se ha ido y ha dejado: 1. La sanidad pública madrileña en un estado de crisis profunda. 2. La educación pública en una situación lamentable y de inferioridad con respecto a la educación privada y concertada. 3. Una red de autopistas radiales de pago en franca ruina. 4. Telemadrid en un estado terminal. 5. Las cuentas de la Comunidad en un estado dudoso, aflorando “descuadres inesperados”. 6. La destrucción de Cajamadrid. 7. Los retazos del caso Gürtel, que, no olvidemos, se inició en Madrid tanto como en Valencia.

 Creo que el señor Vargas Llosa se equivoca: ni Juana de Arco, ni liberal. La clave de Juana de Arco fue que acabó en la hoguera (ella misma). La clave de doña Esperanza es que en la hoguera han acabado otros. Lo que define a un “liberal” es la defensa de la libertad, la generosidad, la capacidad de entendimiento y el interés por el futuro de una comunidad (Wikipedia). La señora Aguirre no ha demostrado nada de esto. Para merecer un adjetivo no basta con adjudicárselo, conviene que sea verdad.