Mariano Rajoy se queda de rodríguez
El presidente suspende sus vacaciones por la crisis y permanecerá en Madrid, al igual que el líder socialista, mientras sus familias veranean en el norte
El presidente será un rodríguez más este verano. La explicación oficial es que la agenda de Mariano Rajoy ha sido modificada por la crítica situación económica del país y, por tanto, suspenderá de momento las vacaciones. “Estará trabajando en su despacho”, aseguran en La Moncloa. Así que, como otros muchos españoles, el presidente trabajará, mientras su familia –su esposa Elvira Fernández, Viri, y sus dos hijos, Juan y Mariano, de seis y 12 años- veranea en Galicia, como todos los años.
“No hay vacaciones previstas”, señalan en La Moncloa, aunque todo depende de cómo se desarrollen los acontecimientos. Se trata de evitar que ocurra lo que el año pasado, cuando el entonces presidente José Luis Rodríguez Zapatero tuvo que regresar precipitadamente de sus vacaciones en Doñana por el ataque a los mercados. La prima se situaba entonces por encima de los 400 puntos. No solo la situación hoy es infinitamente peor, sino que el presidente no quiere dar la imagen de que descansa mientras el vendaval acosa al país. Está escarmentado, tras las fuertes críticas que recibió el año pasado, cuando, como líder de la oposición, desapareció buena parte de agosto de la actividad pública en Sanxenxo (Pontevedra), mientras las cosas se ponían feas.
En cualquier caso, el Gobierno ha fijado dos Consejos de Ministros en el mes de agosto, los días 3 y 24, y, en la semana del 8 al 15, aún no está cerrada la fecha, viajará a Palma de Mallorca (Baleares) para el tradicional despacho veraniego con el Rey. Cualquier escapada de Rajoy para ver a su familia, que tampoco descartan las fuentes oficiales, tendrá que ser entre esos días. La versión oficial es que Rajoy trabajará en el despacho, pero nada impide que por unos días su mesa de trabajo esté colocada allí donde veranea su familia.
Sí tiene previsto tomarse unos días la vicepresidenta, Soraya Sáenz de Santamaría, aunque, como es su costumbre, no se ofrece información oficial de su vida privada. Este será el primer verano de Santamaría como madre, ya que su hijo Iván está a punto de cumplir nueve meses. Además, como la vicepresidenta no se tomó el permiso de maternidad ni ha tenido vacaciones desde que el PP ganó las elecciones el pasado 20 de noviembre, porque ella se ocupó del traspaso de poderes, serán los primeros días de descanso que disfrute con su bebé.
Rajoy no es el único político que se queda en Madrid. Por segundo año consecutivo, el secretario general del PSOE, Alfredo Pérez Rubalcaba, se queda sin vacaciones. El año pasado decidió preparar su candidatura a las elecciones generales del 20-N con actos de precampaña, reuniones sectoriales con su equipo para elaborar el programa y comparecencias en los medios. Ahora, está condicionado por la situación económica del país. De hecho, la primera semana de agosto tiene previsto varios viajes internacionales para analizar el panorama económico. “Las vacaciones están en el aire”, advierten en su equipo. También las de su número dos, Elena Valenciano, pues se ha pedido a toda la dirección socialista que esté localizable y cerca de la capital. En cualquier caso, agregan, ambos intentarán tomarse días sueltos y algún fin de semana, siempre en España. Rubalcaba viajará en ese caso a Asturias, donde veranea todos los años con su familia, y Valenciano, con la suya, en Alicante.
También Cayo Lara, el líder de IU, ha cancelado “de momento” sus días de descanso “en previsión de si hay rescate”, explican en la coalición de izquierdas. Tenía previsto tomarse las dos primeras semanas de agosto, pero de momento la primera la va a pasar en Madrid trabajando. Los planes de Lara eran viajar a su pueblo, Argamasilla de Alba (Ciudad Real), donde ha sido alcalde muchos años y tiene una casa. Si la situación lo permite, tiene pensado reunirse allí con su mujer e hijos y pasar los días descansando del ajetreo, paseando con su perro por el campo o echando una partida al dominó o a las cartas.
La portavoz de UPyD, Rosa Díez, pasará los 10 primeros días de agosto en Chiclana de la Frontera (Cádiz), a donde viaja todos los años. Después, descansará en su casa de Bilbao. La intención de la líder de UPyD es desconectar del ajetreo político. Le gusta pasear por la playa y pasar el tiempo con su familia. Sin embargo, como para el resto de políticos españoles, este año la desconexión no será completa: el país tiene prioridad.
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