Un estadio con premio


La cubierta modular del estadio Baltic Arena (hoy, y de momento hasta 2014, PGE Arena de Gdansk por un acuerdo publicitario con la empresa polaca Polska Grupa Energetyczna) tiene el tono anaranjado y cobrizo del ámbar, el principal mineral que se extrae en esa zona del Báltico y que se comercializa en Gdansk, la mayor ciudad portuaria de Polonia, el lugar en que esta tarde la selección española de fútbol se enfrenta a Italia. Los brillos amarillos del ámbar envuelven un estadio nuevo (se inauguró en agosto del año pasado) peor que ya ha acumulado un amplio currículum de premios.
El primero de los galardones lo consiguió el tono anaranjado que se respira en el interior. Lo hace posible un sistema modular de fachada autoportante y resistente al fuego. Una empresa eslovena -Trimo, con medio siglo de experiencia y con sede en España desde 2007- está detrás del sistema modular de fachadas Qbiss One compuesto por dos chapas de acero galvanizado prelacado adheridas a un núcleo de lana de roca incombustible. Así, fue la unión entre este sistema constructivo y los tres tipos de hormigón que llevó la cementara Cemex hasta el estadio en una planta móvil lo que le valió al campo de futbol en el que España juega su primer encuentro de la Eurocopa el Stadium Business Award el mes pasado.
La cementera de origen mexicano (nació de la empresa Cementos Hidalgo) es centenaria, pero hace apenas dos décadas que, con la adquisición de las firmas españolas Valenciana de Cementos y Sanson, inició su expansión internacional. Con sedes en Filipinas, Estados Unidos o Colombia, hoy la firma cuenta con 50.000 empleados.
Pero hay más premios. Los autores del estadio son los arquitectos del estudio alemán Rhode-Kellermann-Wawrowsky, con oficinas en Varsovia y en Moscú además de tres sedes en Alemania, y con más de 270 empleados. Hoy sólo uno de los tres fundadores, el arquitecto Friedel Kellerman, sobrevive y lidera la compañía que Helmut Rhode, Hans-Günther Wawrosky y él mismo fundaron hace medio siglo, en 1971, en Düsseldorf. Los arquitectos alemanes –que han levantado tres estadios más- acumulan una trayectoria que se expande hasta Shanghai y en la que se han hecho con más de un centenar de premios. Entre otros, el recibido por el PGE Arena, donde juega el Lechia Gdansk, ubicado en el Barrio de Letnica, al norte de la ciudad polaca.
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