La Operación Chamartín cumple su penúltimo paso administrativo
La mega operación urbanística queda pendiente únicamente de su ratificación por el pleno del Ayuntamiento de Madrid el próximo día 25
La comisión de Urbanismo y Vivienda del Ayuntamiento de Madrid ha aprobado esta mañana, con los votos a favor del PP y del PSOE y el voto en contra de IU, el Plan Parcial de Reforma Interior del Area de prolongación de la Castellana, que dará forma a la llamada Operación Chamartín tras más de 20 años de anuncios y de negociaciones. El último trámite para comenzar el gran proyecto urbanístico del norte de Madrid será ahora la aprobación en el pleno municipal que se celebrará la próxima semana.
La única intervención que se ha producido sobre el tema en la comisión ha sido la de Delia Medina, en representación de la Federación Regional de Asociaciones de Vecinos de Madrid, para oponerse a esta "descomunal" operación. En respuesta a Medina, la coordinadora general de Urbanismo, Beatriz Lobón, ha afirmado que el Plan Parcial ha sufrido desde su redacción inicial unas variaciones "muy importantes" que han supuesto "una gran mejora" para la ciudad y para los barrios que circundan la zona, a través de equipamientos y conexiones viarias y de transporte. Por su parte, Izquierda Unida también ha denunciado esta mañana lo que ha calificado de "pelotazo que puede andar en torno a los 3.000 millones de euros y cuyos agraciados serán el BBVA y la inmobiliaria San José a través de la sociedad Desarrollo Urbanístico Chamartín" (Duch).
Unos números de infarto
La operación es fruto de un acuerdo entre el Ministerio de Fomento, la Comunidad, el Ayuntamiento, Adif, Renfe y la empresa Duch y prevé una inversión de 11.100 millones de euros, 4.300 para urbanización e infraestructuras y 6.800 para edificación. Esta operación afecta a una franja de suelo alargada, de 312 hectáreas, que va desde el Nudo Norte hasta la M-40, casi en el límite del término municipal de Madrid. Se estructura en torno a un gran eje, la nueva Castellana, que medirá 2,6 kilómetros, con una sección de 83 metros y dos bulevares arbolados de 13,5 metros de ancho. Prevé la construcción de 17.000 viviendas, 4.000 de ellas de protección pública, 1.204.000 metros cuadrados de oficinas, 165.000 de uso hotelero, otros 165.000 de uso comercial, 542.000 metros cuadrados de zonas verdes y 305.000 de equipamientos.
Entre las infraestructuras que se construirán con cargo a los propietarios del suelo y un coste de más de 1.900 millones de euros destacan la prolongción de la Línea 10 de Metro en 4,2 kilómetros con cinco nuevas estaciones; así como la ampliación en 2,6 kilómetros de la Castellana y su conexión con las circunvalaciones M-30 y M-40. Por su parte, el Ministerio de Fomento y ADIF van a acometer, entre otras actuaciones, la remodelación de la estación de Chamartín y dos nuevas estaciones de Cercanías, que se suman al túnel para el AVE entre Chamartín y Atocha, y la conexión con el aeropuerto de Barajas, ya en ejecución. Asimismo, se construirá el by pass norte de la M-30 que conectará la avenida de la Ilustración con Pío XII y la A-1, con una inversión de 1.400 millones de euros.
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